Irán intensificó la represión de las protestas en varias ciudades en las que estudiantes y trabajadores de fábricas se expresaron en contra del régimen en manifestaciones desatadas hace casi cuatro semanas por la muerte de la joven Mahsa Amini.
La novedad es que se sumaron los empleados de las refinerías de petróleo mientras decenas de universitarios están en huelga. Las huelgas extendidas de los trabajadores del petróleo desempeñaron un papel clave en la revolución islámica de 1979, ya que la paralización total del sector resultó crucial.
Decenas de protestas en Irán
Las manifestaciones por la muerte de Amini, de 22 años, comenzaron el 14 de septiembre tras su deceso al ser detenida por la policía de la moral iraní por no llevar el velo en forma correcta. Las protestas se extendieron de la capital, Teherán, a otras 12 ciudades con las consignas “Mujer, vida, libertad” y “Muerte a la dictadura”. Varias mujeres prendieron fuego sus hijabs.
Entre los detenidos se encuentra una joven bloguera italiana, Alessia Piperno, cuyo padre desconoce su paradero. Algunos periodistas de la televisión estatal iraní fueron despedidos por expresar su apoyo a las protestas. Otros renunciaron con la cobertura de las protestas.
El régimen teocrático acusa a países extranjeros, en especial Estados Unidos, de alentar las protestas, que califica de disturbios. Iran Human Rights contabilizó 95 muertos durante la represión de las manifestaciones.
El Reino Unido anunció este lunes sanciones contra Irán y la policía de la moral, acusada de haber sido la responsable de la muerte de la joven kurda tras las medidas aplicadas por Estados Unidos y Canadá. El Parlamento Europeo llamó a la Comisión Europea a adoptar sanciones. La próxima reunión de los ministros de Exterior del bloque está prevista para el 17 de octubre.
AO JL