Carlos Melconian cuestionó la estrategia económica del Gobierno y advirtió que el equilibrio de las cuentas públicas es una condición necesaria, pero no suficiente, para estabilizar la economía. En Modo Fontevecchia, por Net TV y Radio Perfil (AM 1190), el ex presidente del Banco Central sostuvo que el nuevo esquema cambiario representa “un blanqueo y un reconocimiento conceptualmente correcto”, aunque remarcó que no corrige el atraso cambiario ni resuelve cómo se van a pagar la deuda y los intereses, ni cómo se acumularán reservas sin profundizar el ajuste sobre salarios y actividad.
Carlos Melconian es licenciado en Economía de la Universidad de Buenos Aires, con un máster en la Universidad Torcuato Di Tella. Se desempeña como vicepresidente de la consultora Macroview Sociedad Anónima. Fue presidente del Banco Central entre 2015 y 2017, designado por Mauricio Macri.
... y además, el rey de la metáfora, el rey del didactismo, el rey de inventar figuras con las que se explica lo complejo de manera simple, como la dolarización: “me invitan a comer fideos con tuco y no hay ni fideos ni tuco”, y fue como su vocación pitonisa, quien dijo pocos días antes de que se cambiara el sistema cambiario: “Esto no resiste más”. ¿Cual es tu primera reflexión respecto de si esto que cambió, que no daba más lo anterior, cambió para bien o finalmente es un maquillaje mínimo que no soluciona el fondo del problema?
Dejame empezar por el final. ¿Cuál maquillaje terminan siendo las cosas? Es un fenómeno ex post. Tengo ahí una pequeña duda que seguro, con el correr de la conversación, va a trascender. Pero yo diría, para plantearlo siempre respecto de esto a lo que se viene haciendo. Porque esto no es una conversación supuesta sobre qué debería hacerse, sino que, con independencia de lo que uno crea que debiera hacerse, nosotros siempre que hemos mantenido el diálogo es a partir de lo que viene ocurriendo, qué puede pasar. Entonces, a partir de lo que viene ocurriendo, yo diría, con sus más y con sus menos, esto es un blanqueo y un reconocimiento conceptualmente correcto. Es decir, aunque no estemos frente a un tipo de cambio libre, como se pregona por X cantidad de motivos, si el techo de la banda, acorde a lo que dice el ministro, estaba jugando un rol psicológico en la gente como mecanismo de contención, que con la llegada del secretario a veces demostró que no, porque hubo que poner plata por arriba de la banda.
Lo que sí ocurría, si eso seguía el 1% con inflación del 2 y pico por ciento, yo diría: está claro que la banda psicológica, aunque no juegue ningún rol, ni siquiera psicológico, cada vez se me iba a venir más encima. Entonces, se tomó, dentro de lo más popularizado del anuncio, la idea de decir: bueno, primera decisión, tiremos la toalla acá; que la supuesta banda de contención crezca con, como mínimo, a lo que crece la inflación y no al revés, y no hago un crawl al uno. En algún caso, algún colega lo quería hasta fijar, presionar como si fuera una tablita no convergente con la inflación para que discipline a la inflación. Bueno, esa toalla la han tirado. Creas o no en la psicología de que el techo haga una contención, supongamos que sí. Entonces han dicho: “Bueno, T-2”, o sea, con la inflación de hace dos meses en adelante, empecemos a corregirla sobre la base de la inflación. Casi digo yo, agrego, para que no se atrase más en términos reales el techo y sigamos con esta historia de que hace de contención psicológica realista ahora, por decirlo de alguna manera.
La segunda cuestión es que leí que estuvo en un reportaje el ministro, en donde dice dos cosas. Voy a unir: lo vi el otro día y lo leí ayer; la primer cuestión es que dice: “Tenemos que acumular reservas para que baje el riesgo país”. Cosa que hasta ahora era “no compramos reservas para no emitir moneda” y todas esas cosas que se decían. Ese es un tema; y el segundo tema es la admisión de que la suposición de dónde iba a estar el riesgo ahora no se dio, lo que dificulta la entrada de Argentina genuinamente a los mercados. No lo del otro día, con el bono de mil millones, que fue publicitado como la vuelta a los mercados, pero todavía no es ir a Wall Street, con ley extranjera, voluntariamente a colocar. Entonces, yo tengo que admitir que estas cosas van con independencia de que se han retractado de algunas cosas, en el buen sentido: conceptualmente avanzan en algo que venía diciendo que no era correcto y que ahora lo admiten. Listo, a otra cosa.
Tercer tema que deja entrever el ministro, de nuevo, no lo he visto, lo leí, pero veníamos intuyendo que puede ser así: que él va a tomar deuda por los intereses en lugar de usar superávit fiscal en pesos para ir a ser un demandante del dólar el Tesoro. El comunicado del Banco Central lo ignora al tema. Habla del Banco Central, de reservas y de demanda de dinero. Es decir, si la gente quiere pesos, se los voy a dar comprándole dólares, y eso es acumulación de reservas por definición. Le falta algo, que me imagino que el presidente Bausili va a decir: “Ese no es un tema mío”, es que el Tesoro se supone que tiene superávit fiscal en pesos para ir a comprar dólares o eventualmente dárselos al Banco Central para sacarle los dólares que el Banco Central compró para pagar los intereses de la deuda. Caso contrario, imagino que va a ir a tratar de buscar endeudamiento externo para los intereses, sabiendo que A) lo tiene que conseguir. B) Yo podría decir cínicamente: si conseguís endeudamiento externo, es decir, admitís que subís la deuda para capitalizar intereses. Entonces, ¿para qué querés superávit fiscal en pesos? Te sobran 15 billones de pesos o un punto y medio del PBI, porque si esos pesos no los vas a usar, ¿qué vas a hacer?
Digamos, en un símil de lo que ocurre con los supuestos intereses en pesos de las LECAP, hay colegas míos que se han quejado de los números fiscales porque dicen que no están contemplados los intereses de la deuda pública en pesos, que son un monto importante. Claro, ¿por qué? Porque se capitalizan con la deuda pública en pesos. Cada vez que se roloverea, te dan más bonos por el interés. Por lo tanto, la deuda pública en pesos está aumentando. Alguien diría: “Se licúa con la inflación”. Bueno, salvo que esté ligada a inflación o a tipo de cambio. Estamos entrando en detalles técnicos porque no hay otra manera de hacerlo. Yo diría, en términos no tan populares, es que admiten que quieren comprar reservas y que lo van a hacer sí y solo sí la gente quiere pesos. Ese es otro paso que está por venir.
Alguien podría decir: “Mirá, vos tenés que comprar reservas igual”. Sí, pero si la gente no tiene pesos y yo voy y la presiono, es decir, sigue estando pendiente ahí adentro lo que el Fondo Monetario llamó price discovery, que es: mirá, yo te voy a poner a vos un objetivo de reservas y vos tenés un objetivo de compra de dólares para pagar intereses. Y si querés abrir el cepo y va a haber dividendos y personas humanas, bueno, va a haber un precio realmente flotante que te lo tenés que bancar. Bueno, ese es un paso al cual se está yendo y donde la mayor admisión es: bueno, arranquemos con el intento de comprar reservas así, con el intento de pagar los intereses así y con el intento psicológico de que tiremos el techo para arriba para que no nos digan, A) que estamos atrasando el techo, y B) para que la realidad nos lo perfore.
Caputo, Bausili y la importancia de la "buena calibración"
Ahora, cuando yo planteaba la palabra maquillaje, me estaba refiriendo de alguna manera, una manera más benevolente de la que usó ayer Arriazu, cuando dijo que era una tontería lo que se había hecho, en el sentido de que no corrige finalmente el retraso cambiario, porque lo que hace es no aumentar el retraso cambiario, pero no corrige el retraso cambiario y, al mismo tiempo, no resuelve el problema de cómo vas a pagar la deuda y cómo vas a juntar las reservas. Obviamente, con un dólar que hubiese aceptado el retraso cambiario, no solo que no hubiese agregado retraso cambiario, se le generarían más posibilidades para, primero, resolver el problema del atraso cambiario, con todas las otras consecuencias que tiene, y segundo, más fácil para generar mayores reservas. ¿O me equivoco?
Voy a dividir tu comentario en dos. Primero, has mencionado a un colega y maestro, de la que no voy a opinar públicamente, pero solamente te voy a decir una cosa. Como lo tienen de amigo a Ricardo, entonces no dicen nada, pero lo que Ricardo ha propuesto desde que este programa empezó es mucho peor que lo que están haciendo, porque sería el reino del atraso. Pero porque lo conozco, e intelectualmente él toda la vida ha pensado así, desde que armó la tablita de Martínez de Hoz. Entonces, yo contra esa profundidad intelectual no tengo nada. Vos sos de Boca, yo soy de River; vos sos de Independiente, yo soy de Racing. Es decir, está claro que el gobierno prefiere ignorarlo antes que mandrilearlo. Así que lo dejo ahí, por aparte.
Efectivamente, como vos decís, el tema de si voy o no a acumular reservas y cómo voy a conseguir la deuda para los pagos de la deuda sigue abierto. Obvio que esto no lo contesta, pero esto va en línea con: si tengo que conseguir plata genuina para pagar la deuda y me rindo frente al evento de que comprar dólares va a bajar el riesgo, y bueno, compremos dólares. Eso es lo que está ahí adentro. No es que dice: “Sí, dime una cosa: si vos apretas este botón y comprar dólares, automáticamente aparecen los que te ofrecen plata para pagar la deuda”. No. Evidentemente han elegido, frente al fracaso de lo anterior para bajar el riesgo: ¿cómo puedo hacer para ver si es cierto que acumulando reservas voy a conseguir plata?
Vos tenés capital e intereses. Eso da un monto: 20.000 millones de dólares. Porque ellos quieren pagar los intereses con deuda también, acorde a lo que dice el ministro. Si no conseguís 20, no podés acumular reservas, porque lo que comprés lo tenés que usar para pagar. Como pasó en 2024, que compran dólares pero no acumulan reservas porque tienen que pagar y honrar la deuda. Es siempre preferible honrar la deuda a acumular reservas. Entonces, si ellos consiguen, ellos tendrían que ir por 10.000 millones para cancelar capital y comprar 10 para pagar intereses. Ellos quieren ver si consiguen 20 para que, si compran 10, se los queden de reserva. Pero de vuelta, más deuda pública. Y todo esto, ¿quién lo sabe? Tusam.
Argentina prueba el apetito externo con la venta de un bono en dólares
Vos estuviste preparando en la Fundación Mediterránea, en el IERAL, un plan económico en 2023, y yo a lo que me refería es a lo siguiente: vos podés tener superávit fiscal, pero si tenés déficit de cuenta corriente, este es otro de los problemas que repercute también en la competitividad de tus propias industrias, en la cantidad de importaciones que vas a tener, en la cantidad de exportaciones que vas a tener. No solamente los economistas que llaman mandriles recomendaban un dólar más alto. Digo, fondos de inversión del más alto nivel han dicho que no van a invertir en la Argentina en la medida que se mantenga este dólar y este atraso cambiario.
Me pregunto si la cuestión de fondo, que es que el dólar está retrasado, no tiene que ver, para mejorar al mismo tiempo la competitividad argentina, para mejorar la posibilidad de acumular reservas como elemento secundario, fundamentalmente para mejorar tu cuenta corriente, que tengas más superávit. Y finalmente, si este no es el problema dogmático: prefieren la inflación a cualquier costo, sin prestar atención al tema del déficit de cuenta corriente.
Efectivamente, acá hemos escrito mucho en términos del superávit fiscal como condición necesaria, pero no suficiente, en términos de tener los dos superávits. Lo de ser fanáticos del equilibrio del fisco viene desde la época cuando me tocó acompañar al presidente Macri, que era visto dentro de su equipo, que ahora incluye a este presidente con Federico Sturzenegger y el Toto Caputo. Imaginate que a mí me ponían a la derecha de ellos solo por pedir equilibrio fiscal, no superávit fiscal. Mirá cómo se va metamorfoseando la gente, porque yo sigo parado en el mismo lugar y ellos están a la derecha mía hoy en esa materia. En donde todavía no los veo que han recapacitado es en que es condición necesaria, pero no suficiente. Vale para lo social y para lo técnico. Para lo técnico, que es lo que me estás preguntando y ahora lo voy a contestar, tenemos que hacer referencia también a la cuenta corriente. Para lo social, te podría decir que, de momento, cuando miro empleo, actividad, inflación o poder adquisitivo, evidentemente con el superávit fiscal no se come, no se educa y no se cura.
Pero, de nuevo, no quiero meter púa. Porque si me preguntan: dado que no se come, no se cura y no se educa, ¿tengamos déficit fiscal?, yo les diría: “No, se equivocan”. Porque no comer, no educarse o no curar no depende del déficit fiscal. En esto no quiero aflojar la bandera. Ahora, dejame volver a lo técnico. Nos ha resultado muchísimo más útil en lugar de hablar de cuenta corriente del sector externo, hablar de flujo de caja en dólares. Porque la cuenta corriente negativa y el flujo de caja en dólares que no te da, casi pasa lo mismo. Porque lo único que estoy haciendo a la cuenta corriente es agregarle la cuenta capital y sacar una caja de zapatero, que tampoco nace. Si el nivel de cuenta corriente es muy alto, negativo, necesita mucho financiamiento externo que te lo financie. Y no da negativo y tiene que venir Bessent.
Bueno, entonces, ¿qué ocurre? Cuando vos lo transformás en un flujo de caja, el problema de Argentina en la cuenta corriente no es el comercio. El superávit comercial está dando positivo. Y vos tenés que pensar que cada vez que empezaban estos programas de atraso cambiario y boom de importaciones, el primer defecto de ellos era el déficit comercial, donde los más ideológicos de eso decían: “No te calentés porque hay un chino que te lo está financiando”. Bueno, eso, gracias a energía, está conservándose positivo de cinco dígitos. Todo da entre cero y negativo cuando le ponés energía; da 12.000, 13.000 millones de dólares.
Segundo tema: el flujo de capitales, sin ser lluvia de inversiones y siendo más capital criollo financiado en depósitos en dólares o energéticas, con excepción de alguna extractiva minera, no está viniendo flujo de capitales del exterior, pero los locales tienen que seguir poniendo, trayendo básicamente minería, petróleo, gas. Entonces, eso también está siendo de cinco dígitos. Cuando sumo el comercio exterior y sumo el flujo de capitales, en esta suerte de balance de pagos hecho caja, da más de 30.000 millones de dólares. Lo primero que quiero decir entonces: no hay un problema de dólares hoy en la economía. Si fuera vivo el equipo económico te diría que no hay atraso cambiario y están entrando capitales para Vaca Muerta. Lo que pasa es que la pregunta que uno tiene que hacerse ahí es: ¿y dónde están?
El plan de Caputo para la vuelta a los mercados hace tambalear la renegociación con el FMI
Bueno, es que acá, la mala praxis del 11 de abril metió a personas humanas adentro del mercado oficial y eso terminó dando 33.000 millones de dólares. Es el doble de velocidad de lo que tumbó al presidente Macri en seis meses. Entonces vos decís: “¿Qué fue, Margarita Lochancho? Si te liberaron el cepo”. ¿Y qué creés que haga que liberaron el cepo? Y tampoco ha sido el riesgo Kuka. Porque esto fue abril, mayo, junio, julio, agosto, hasta el fatídico 7 de septiembre de la provincia de Buenos Aires, que potenció, pero no gatilló, esto que estoy diciendo. Por lo tanto, ¿qué ocurre? Como me entró 30 y se me fue 33, dicho así, el otro día un miembro del equipo económico, que no tiene vergüenza, dijo: “Bessent puso tres nada más de los 30, el resto lo pusimos nosotros”. Sí, pero puso los tres en 10 días. Acá el problema que hay es ese.
Vos incluso también dijiste que 2000 no sería problema. Entonces mi pregunta, ¿$1 de 2000 no resolvería todos estos problemas? Porque haría que menos argentinos compren, que la balanza sea más positiva, ¿no resolvería todo?
Primero,se supone que amortiguaría. Cuando digo lo del dólar de 2000, miro la historia argentina. No es que yo dije: “Che, póngalo a 2000”. La historia argentina muestra una cosa curiosa, que aun con control de cambios, y aun con un dólar a 2000 pesos de hoy, turismo neto solo dio 8 o 9.000 millones por año en la Argentina. Negativo. Y aun con control de cambio y 2000 pesos por dólar, un puchito de colchón hubo, ¿por qué digo esto? Porque post elección y post riesgo Kuka, noviembre con gran satisfacción y diciembre, se ve que todo el proceso dolarizador privado cayó a apenas 1000 y pico de millones por mes. Pero 1000 y pico de millones por mes por 12 va a dar 12, 13, 14, que hay que meterlo en el flujo de caja zapatera que estuvimos hablando.
Quiere decir que si el superávit comercial se mantiene y no baja el ingreso de dólares, una vez a la mitad se lo vuelve a llevar la tía, y vos me decís: “Pues la tía va igual a 2000 a Punta Cana”. Se ve que hay algunas tías históricas que van a Punta Cana a 2000, porque lo veo en la serie de los últimos 20 años con control de cambio. ¿Por qué? Porque hay un grupo de tías que no, no les gusta la costa argentina. Entonces se van allá. ¿Qué quiere que haga? ¿Qué le vas a decir? ¿Que no? Bueno, entonces, ¿qué ocurre? Lo que estamos haciendo en esta es mostrar que cuando metés los intereses, cuando metés a la tía, cuando metés al ingreso de capital y cuando metés al comercio exterior, hay ahí un guiso donde reserva genuinamente sube si eso se equilibra y encima comprás. Y conseguís capital para la deuda y para los intereses. Cando se dice la cuenta corriente negativa, la cuenta corriente positiva, atraso cambiario, después te tenés que zambullir un poco
El plan económico que vos habías preparado, no planteaba una devaluación el 10 de diciembre del tamaño de la que hizo Milei, que sumado al impuesto país, pasó el dólar de 300 y pico a más de 1000. El que ustedes habían planteado era de 800. ¿A qué el dólar de 800 hoy, corregido por la inflación, cuánto sería? ¿Serán 2000?
El dólar de Milei de 800, no de nosotros. Este, es 2100 pesos, sí.
¿Y el de ustedes, que era 600?
650 era, una cosa así.
¿Y corregido por inflación, qué te daría? 1800
Hay que hacer la cuenta, pero ponele que sería 650, 800, 2100, 1700. Muy bien, si lo querés así. Que sería este techo de la banda del año próximo con 25% de inflación. Ponele. Pero lo que pasa es que, bueno, aquello, de nuevo, por eso yo te decía, mejor gastar el tiempo en montarte a los que hay, más que discutir lo contrafáctico de aquello. En realidad, pero es buen punto igual el tuyo, porque yo te voy a decir qué había en el corazón de aquello. Primero, explicitar desde el día 1 la bimonetaridad, con convivencia y no competencia de monedas. Ir a la peruanización o uruguayización, uruguayización de movida, con las reglas de juego. No porque lo imponíamos nosotros, sino porque es donde la gente se sentía cómoda. Pero el régimen cambiario y el doble mercado cambiario pensado en aquel momento formal tenía como objetivo, por supuesto, con ancla política, la idea de que toda una primera parte del gobierno fuera destinada a que se acomoden los precios relativos de la economía, que incluye todo el atraso que se heredaba y la búsqueda del tipo de cambio de equilibrio.
Nosotros poníamos mucho énfasis en eso porque solo después de eso viene un plan de estabilización, no de desinflación. A nosotros mucho no nos interesaba inicialmente un plan de desinflación ficticio, porque queríamos ir a un plan de estabilización post acuerdo de precios relativos. Debo admitir que tenía un riesgo, porque a lo que yo estoy diciendo se lo llama, “va a hacer el trabajo sucio para que la papita se la lleve el que viene atrás tuyo”. Acá no han querido hacer eso. Entonces, el proceso de desinflación en el que estamos, al dos mensual, que no han tenido más remedio que admitirlo, no es una dieta para ir a un dígito anual. Es largar el vino. Porque si vos largás el vino, te deshinchás, dejás de acumular líquido y te hace bien, porque te levantás a la mañana mejor. Pero no es dieta, es alargaste el vino. Cuando el vino lo largás y vas a 25, 30 anual, una vez que te acostumbraste a alargar el vino, es bueno, pero te quedás en 25, 30.
Entonces ellos van a empezar, en 25, 30, un fenómeno de indexación oculta para ver cómo se dirime este tema. No lo van a decir, pero de alguna manera ha quedado a merced de la indexación. La pregunta ahora acá es: ¿cuál pasa a ser el ancla? Y bueno, seguro el gobierno va a decir lo fiscal. Lo fiscal es un muy buen ancla para nuestro arte, pero te mantiene ahí. Yo voy a agregar otro tema que el gobierno no lo va a admitir, pero es el ancla salarial. El salarial y el del nivel de actividad, o el del poder adquisitivo y el nivel de actividad, muy ayudado esta vez salarial, empleo por informalidad. Cuando Menem no tenía informalidad, era desempleo, con menos caída del poder adquisitivo. Esto es informalidad con más caída del poder adquisitivo. Entonces, ese es el tema que está burbujeando hoy, y donde te viene del sector construcción, industria y demás, ataques de pánico en términos de nivel de actividad. Donde ahí se mezclan los sanos y competitivos, pero dice: “Che, no tengo demanda. ¿Qué está pasando?”. Con los no competitivos históricos subterráneos, que dicen: “No, vos tenés que aprender a competir”. Entonces se arma una bolsa donde el competitivo se siente herido cuando le dicen eso. Dice: “Se me derrumbó la demanda, hermano”.
LT