El consultor financiero, Rodrigo Álvarez, sostuvo que "Sergio Massa vino a hacer lo que no pudo hacer Martín Guzmán, pero con otra capacidad y otro músculo político". "Si no hacemos ajustes o empezamos a corregir la dinámica de gastos, la deuda va a ser impagable", aseveró en Modo Fontevecchia, por Net TV y Radio Perfil (FM 101.9).
¿Podría haber un pacto entre el oficialismo y la oposición para ponerle un techo a la inflación? ¿Hay posibilidades de que baje para mediados de año?
Te invito a pensar cuál sería la dinámica de la economía argentina si ese pacto no existe. Me preocupa si hay una dinámica de pesos acorralados de las empresas y también de familias en el sistema financiero que, ante un escenario de incertidumbre, van a buscar un refugio y van a correr a presionar las divisas y el tipo de cambio paralelo.
Con la renuncia de Martín Guzmán se paró la economía. En ese momento fue una muestra de lo que te mencionaba antes, ya que tuvimos un gran salto inflacionario donde pasamos de un piso de 3% a este de 6%.
Y si sobre este nuevo piso se acrecienta la incertidumbre, en el marco de las elecciones, la inflación se va a volver a escapar. De esta forma, complicaría no sólo a este gobierno, sino que generaría una herencia complicada para el próximo.
La inflación de los alimentos en Argentina es la más alta de América Latina
Por todo esto, hay que generar acuerdos básicos, sobre cuestiones simples, como el cumplimiento de la deuda, que hay una voluntad de gestionar los pasivos de una manera racional.
¿Sergio Massa vino a hacer lo mismo pero pintando de otra forma? ¿Hay voluntad política para hacer acuerdos en ese sentido?
Massa vino a hacer lo que no pudo hacer Guzmán, pero con otra capacidad y otro músculo político. Cuando llega el abismo la dirigencia política argentina entiende que hay que hacer concesiones.
Y eso ya sucedió cuando después de las PASO todo indicaba que Alberto Fernández iba a ser el nuevo Presidente y esto generó una corrida en todos los mercados. Al principio el Jefe de Estado decía que el tipo de cambio estaba muy bajo y después empezó a mostrarse más moderado, porque sabía que, al final de la historia, la herencia que iba a recibir era mucho peor. Primó la racionalidad.
Mi expectativa es que eso mismo se produzca mucho antes para evitar un nuevo salto inflacionario. Estamos hablando de que podemos terminar por debajo del 100% o por encima del 130% de inflación.
La deuda con el Fondo Monetario Internacional
Alejandro Gomel (AG): Más allá de la cuestión inflacionaria, ¿qué va recibir el próximo gobierno en materia de deuda? ¿El acuerdo de Guzmán con el Fondo fue positivo o complicó más las cosas?
La deuda en dólares va a tener que reestructurarse porque esto ya está incorporado en la evaluación de los precios de los activos. Cuando un gobierno reestructura la deuda es para generar una trayectoria de pagos que se perciba como cumplible.
Lo que hizo Guzmán hoy no es percibido de esa manera por el mercado, que ya está incorporando que va a haber una nueva reestructuración, la cual debería mejorar la imagen de la capacidad de pago que tiene el país.
Estabilización para el desarrollo o ajuste
Al respecto de la deuda en pesos, no creo que haya que reestructurar, pero es necesario empezar a trabajar desde ahora con la gestión de esa deuda. De alguna manera esto es lo que alerta la oposición: si no hacemos ajustes o empezamos a corregir la dinámica de gastos, la deuda va a ser impagable.
AG: A partir de la posible reestructuración de la deuda en dólares, ¿se puede hablar de un riesgo de caer en default?
No creo que Argentina caiga en default. El mercado ya lo tiene incorporado, la Argentina va a cumplir con los compromisos, pero va a haber una reestructuración voluntaria para mejorar las chances de pago. Esto es muy lógico y esperable para el año próximo.
Los problemas a resolver por la gestión económica son caras de un mismo cubo: hay que ordenar la situación fiscal, corregir el tipo de cambio y hacer un plan de estabilización, entre otras cuestiones fundamentales.
AO JL