El dueño había dejado al animal pastando en ese lugar, y al no encontrarlo, pensó que se lo habían robado, contaron las fuentes del caso.
El operativo de rescate se llevó a cabo en Génova y Ratery y participaron diferentes áreas de la comuna, personal de Defensa Civil, Dirección de Rescate y Riesgos Especiales, efectivos policiales, personal de la Dirección de Bomberos y la Dirección de Zoonosis y Bienestar Animal.
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En la tarde del 12 de septiembre, empleados de una empresa encargada de llevar a cabo un relevamiento de recursos descendieron a la cámara de inspección y se toparon con el animal. Rápidamente avisaron a las autoridades y el 13 de septiembre se llevó a cabo el operativo de rescate.
“Tenían una pluma (grúa) en el lugar, con la que comenzaron a realizar las maniobras de extracción del animal”, explicó el director de defensa Civil, Rodrigo Goncálvez. Y contó que el rescate se complicó “porque era un caballo que se movía demasiado y corría riesgo su integridad física”.
Con una grúa, eslingas y cadenas se logró dar forma a un arnés que permitió enlazar al animal e izarlo para devolverlo al nivel de vereda. Dos veterinarios de Zoonosis del municipio participaron en el control y primer chequeo del animal, que estaba en buena condiciones a pesar de la situación de agotamiento que presentaba por la permanencia en ese lugar desconocido y el esfuerzo al que fue sometido para que el rescate tuviera el mejor final.
Tras su rescate, el animal fue sometido a una evaluación clínica por parte del equipo de veterinarios de Zoonosis, quienes confirmaron que se encuentra en óptimas condiciones de salud. Además, los empleados de la empresa involucrada tomaron medidas adecuadas en la tapa de la cámara para prevenir futuros incidentes de este tipo.
Según informaron, el animal cayó, luego de que el dueño la dejara en ese lugar pastando, y la yegua no vio el hueco que había en el piso. El dueño en un primer momento pensó que la habían robado pero 48 horas después, el personal de la firma Plantel le comunicó lo sucedido.
