En los últimos meses, el mito de la Trafic blanca se instaló en los medios. Vía mensajes de WhatsApp y redes sociales se extendió el alerta por un fenómeno que se convirtió “viral”.
A mediados de mayo, ante el afluente de las denuncias virtuales y formales relacionadas con el posible secuestro o intento de secuestro de mujeres jóvenes y adolescentes mediante una camioneta blanca, impulsó a la procuradora Alejandra Gils Carbó a crear una comisión de fiscales, sugerida por Marcelo Colombo y la fiscal Alejandra Mangano, titulares de la Procuradoría para el Combate a la Trata y Explotación de las personas (Protex), para investigar el fenómeno en profundidad. La comisión, también integrada por los fiscales Marcelo Martínez Burgos, Matías Di Lello, Sebastián Basso, Santiago Marquevich y Mariela Labozzetta –en su carácter de titulares de las Unidades Fiscales de Secuestro Extorsivo y Violencia contra las Mujeres, respectivamente– y Diego García Yomha, Director a cargo de la Dirección General de Análisis Criminal y Planificación Estratégica de la Persecución Penal (DAC), se encuentra en una etapa de diagnóstico en la que no se descarta ninguna hipótesis.
“A diferencia de lo que ocurría antes, ahora podemos identificar a las víctimas y relevar los casos. Para llegar a una conclusión, nos preguntamos, ¿los casos se consuman?, ¿con qué fin se cometen? Si se determina que no son reales, también poder decirlo con argumentos para tranquilizar a la sociedad debido a que la preocupación sí existe”, explicó a PERFIL Labozetta.
Al momento, no existen elementos que permitan afirmar que exista la Trafic blanca temida, pero las hipótesis que trabajan los fiscales son:
1 Mito. De las 202 condenas y 529 procesamientos dictados en el país por el delito de trata, no se registraron casos de captación de las víctimas mediante una camioneta blanca. Es decir, no hay antecedentes. Por el contrario, la forma más común de captación de víctimas es a través de ofertas laborales. La ola de denuncias, registró 34 casos en 2017 según la DAC, la mayoría concentrados en abril, pudo deberse a la sugestión provocadas por los mensajes virales.
2 Trata de personas. No se descarta que la Trafic blanca sea utilizada para secuestrar mujeres con el fin de reducirlas a la explotación sexual. Con excepción de dos casos en que los abordados fueron varones, en el resto de los hechos las víctimas fueron mujeres, en diez de ellos, menores de 18 años. Según el relato de los denunciantes, la dinámica suele ser la misma: iban por la vía pública, y entre una y cinco personas, en su mayoría hombres, descendieron de un vehículo e intentaron captarlos. En dos hechos, las víctimas denunciaron haber estado retenidas por algunos minutos.
3 Motivos políticos. Una de las hipótesis que baraja el Gobierno es la posibilidad de que grupos ligados al kirchnerismo y a la oposición hayan difundido casos falsos para desatar pánico. Los fiscales no lo descartan.
4 Reacción a las movilizaciones por los derechos de las mujeres. El número de femicidios aumenta en Argentina, al ritmo de los reclamos contra la violencia machista que buscan establecer, en su lugar, un estado de igualdad, respeto y libertad para la mujer. La Trafic blanca podría ser un medio para amendrentar movimientos sociales que concentran todo su potencial en el #NiUnaMenos.