El Gobierno Nacional tendrá semanas ajetreadas por el entendimiento final que busca lograr con el Fondo Monetario Internacional (FMI). A la rúbrica de un texto oficial con el organismo que pueda ser enviado al Congreso antes del tercer vencimiento del año, se suma la disidencia interna por los votos del Frente de Todos. Desde la oposición afirman que habrá quórum y se muestran en contra del default.
La negociación que intentará acelerar por estos días el ministro de Economía, Martin Guzmán, con las autoridades del Fondo para firmar formalmente un acuerdo por la deuda de 44.000 millones de dólares, se presenta compleja desde distintos ángulos para el ejecutivo nacional.
Uno de ellos es el tiempo, que empezó a correr desde que se anunció el pre acuerdo y que ahora tiene como dead line el 23 de marzo, fecha en la cual se vencen 2.800 millones de dólares con el organismo multilateral. A ello se suma la necesidad del oficialismo de poder tener los detalles de la letra chica para que luego sean enviados al Congreso.
Allí, en ambos palacios legislativos, también hay diferentes escenarios. El senador mendocino y ex presidente de la UCR, Alfredo Cornejo, aseguró que la mesa nacional de Juntos por el Cambio está "100% de acuerdo en contribuir para que el Gobierno no entre en default", pero aclaró que ninguno de sus integrantes "defendió el acuerdo".
El Auditor General de la Nación e integrante de esa mesa, Miguel Pichetto, fue algo más esclarecedor: "Si partimos del no al default y que hay que honrar las deudas, eso deviene en una actitud positiva frente al acuerdo, para que el Gobierno logre el objetivo”, dijo.
Tanto desde la UCR que comanda a nivel nacional el gobernador Gerardo Morales como desde la Coalición Cívica que preside Maximiliano Ferraro, declararon sus intenciones de plegarse al acuerdo del Gobierno.
Qué pasa con los votos en el Frente de Todos por el acuerdo con el FMI
Intentando resolver las tratativas con el FMI para poder mostrar la llamada Carta de Intención del texto en el Congreso y pidiendo "responsabilidad" a la oposición para que lo apoye, al Frente de Todos se le abre otra puerta de conflicto: la disidencia doméstica.
Estas diferencias en el interior de la coalición quedaron más expuestas con la renuncia a la jefatura del bloque de Máximo Kirchner en Diputados. Su reemplazante, Germán Martínez, viene pregonando desde hace días que los votos van a estar. “Yo voy a trabajar para que ese acuerdo se apruebe, para que tenga el mayor poder de adhesión de la Cámara de Diputados, para que en el interior de mi bloque podamos tener la posición más convergente posible, porque creo que ese acuerdo nos permite la ventana de tiempo para consolidar el proceso de recuperación económica”, dijo este fin de semana en Radio 10.
“No estamos pidiendo con este acuerdo que nos enamoremos de Kristalina Georgieva como quería Macri con Lagarde”, marcó sobre el acuerdo, una especie de llamado a la solidaridad. Eel presidede la Cámara de Diputados, Sergio Massa, también dijo que las afirmaciones al acuerdo estarían.
Esta semana, Martínez se reunirá con los 117 congresistas del frentetodismo para hablar sobre las sesiones extraordinarias que se llevarán adelante en febrero.
Sin embargo, hay diputados que ya manifestaron de qué manera puede darse la votación. "La oposición lo va a votar no para hacerle un favor al gobierno, sino como gesto al FMI. En el Frente de Todos va a haber unos 30 que nos vamos a abstener. No estamos en contra de hacer un acuerdo con el FMI, pero es una forma de manifestar nuestras diferencias, sin bloquearlo", dijo en la semana Itaí Hagman.
Qué dijo Alberto Fernández sobre el acuerdo con el FMI y Estados Unidos
La gira del Presidente por Rusia, China y Barbados tuvo réplicas que no cabían en los cálculos oficiales, sobre todo porque se generaron a partir de los dichos del mandatario nacional y sus gestos.
En Rusia y con Vladimir Putin, Fernández dijo que estaba "empecinado" en terminar con la dependencia argentina con el Fondo y con los norteamericanos. Luego paseó en China y firmó un acuerdo para incorporar al país a la Ruta y la Franja de la Seda, proyecto que el país asiático ya tiene con 140 países y que a su vez presenta una postura contraria a los intereses comerciales del gobierno de Joe Biden.
En Barbados, el Presidente argentino dijo que el recordaba muy bien quienes lo habían apoyado en las negociaciones con el Fondo y obvió a Estados Unidos. El sábado en Radio 10 trató de enmendar esa frase y manifestó que "la característica de ese préstamo inusual, desmedido del FMI no lo digo yo, lo ha dicho el propio Fondo Monetario. Por eso así como el gobierno de Trump ayudó en su momento al gobierno de Macri, ahora el gobierno de Estados Unidos cuando llegó la hora de encontrar una solución al problema acompañó con su voto".
