Luego de que el procurador interino, Eduardo Casal, considerara una “perturbación” la comparación que realizó Alberto Fernández entre los fiscales Alberto Nisman y Diego Luciani, el mandatario se defendió y le respondió con una carta las críticas recibidas.
“Debo señalar que dichas expresiones en modo alguno pueden ser interpretadas en el sentido de querer condicionar el accionar de un funcionario y ello queda claro toda vez que fueron vertidas cuando el Fiscal de la causa ya había finalizado su alegato en el proceso”, argumentó Fernández.
En ese sentido, el mandatario consideró “oportuno señalar que el Poder Judicial y sus magistrados y funcionarios no están ni podrían estar exentos de críticas y opiniones en una sociedad democrática”.
Por esto mismo, retomó el discurso del kirchnerismo y enfatizó en lo sucedido con el ex presidente de Brasil Lula Da Silva que “fue condenado y encarcelado injustamente, y por lo tanto, proscripto para participar de las elecciones presidenciales”.
“Me he expresado en el marco del derecho a la libertad de expresión garantizado en la Constitución Nacional y sin infringir los límites establecidos en su artículo 109”, argumentó.
Además, aseguró que sus declaraciones “constituyen una expresión de lo que observa una gran parte de la ciudadanía: que, a la hora de actuar, muchos magistrados y funcionarios de la Justicia Federal prestan más atención a determinados intereses fácticos y/o políticos que a las normas vigentes, y que esta situación hiere a la democracia”.
Las declaraciones del Presidente se dan luego de que Casal definiera como una “perturbación en el ejercicio de sus funciones” a la comparación que realizó Fernández entre Nisman y Luciani mientras avanza el juicio por la Obra Pública.
“El Sr. Procurador expresa su preocupación por una supuesta injerencia por parte del Presidente de la Nación en un proceso penal, pero no lo ha preocupado, ni ha visto injerencia alguna cuando el ex presidente Mauricio Macri, estando en ejercicio del cargo, recibió al imputado Luis Chocobar en la Casa Rosada”, lanzó el mandatario.
Así, Fernández continuó: “Tampoco llamó la atención que el ex presidente, también en ejercicio de sus funciones presidenciales, directamente instruyera a su ministro de Justicia para que iniciara un juicio político al juez Alejo Ramos Padilla y manifestara (textual) ´creemos que no es un juez que actúe con ecuanimidad´”.
El jefe de Estado consideró que “el celo” que muestra la carta del procurador “hubiera sido importante para la salud democrática de nuestro país, que se plasmara también en impulsar investigaciones transparentes respecto de las motivaciones reales que tuvieron algunas visitas realizadas por destacados miembros del Poder Judicial a Macri en la quinta de Olivos”.
Por esto mismo, acusó a Casal de tener una “doble vara para medir hechos institucionales” y aclaró que “esta sistemática asimetría en las posturas adoptadas por parte de algunos magistrados y funcionarios de la Justicia Federal (...) tornan aún más necesario que se abran estos debates para cuidar la salud de la democracia”.
“El trabajo de Luciani y Mola fue público y ya está cumplido”
El presidente de la Asociación de Fiscales, Carlos Rívolo, volvió a defender a sus pares Diego Luciani y Sergio Mola, luego de las críticas que recibieron tanto de Cristina Kirchner como de Alberto Fernández. “Su trabajo fue público, de cara a la gente y ya está cumplido”, aseguró.
En diálogo con Modo Fontevecchia, por Radio Perfil, el fiscal también destacó que el juicio contra la vicepresidenta “no se terminó, acá hay un principio de inocencia”.
“La Asociación de Fiscales no hizo más que recordarle al Presidente que la Constitución habla de un contrato social, ratificado en 1994, que le prohíbe que pueda pronunciarse sobre causas existentes o que se revivan. Eso no se le prohíbe a cualquier ciudadano, ese derecho lo tienen. Pero el Presidente lo tiene vedado porque su palabra ‘vale doble’, es decir, que tiene un peso específico importante”, expresó Rívolo sobre el comunicado que sacaron desde la agrupación que lidera esta semana.
Sobre el trabajo de Luciani y Mola destacó que “nadie puede decir que no sabe de qué defenderse. Escucharemos las jornadas de la defensa. Lo que hicieron los fiscales en el alegato fue presentar los hechos y cómo encajan en el Código Penal”.