El juez federal Sebastián Casanello terminó la investigación judicial sobre presuntas escuchas ilegales que pesaba sobre el electo presidente Mauricio Macri.
La causa quedó en condiciones de "clausura de la etapa de instrucción", el paso previo a que el juez le "corra vista" a las partes para que formulen sus requerimientos de elevación a juicio o, como en el caso del líder del PRO, el pedido de sobreseimiento.
El juez pedirá dictamen a los acusadores particulares, Daniel Leonardo, Sergio Burstein, y al fiscal federal Jorge Di Lello. Luego de que todas las partes formulen su requerimiento, Casanello decidirá un criterio definitivo sobre cómo evolucionará la causa.
Di Lello por su parte, tiene dos opciones: o pide que eleven a juicio oral a Macri o pide su sobreseimiento.
Los letrados Santiago Feder y Ricardo Rosental plantearon al juez la desvinculación del referente de Cambiemos de la causa, y para ello argumentaron que la producción de prueba que estaba pendiente para definir iría o no a juicio oral no había permitido disipar las dudas por las que el magistrado decidió apartarlo del proceso oral.
El flamante presidente le pidió a Casanello que declare su sobreseimiento definitivo en la causa en la que está procesado por las escuchas ilegales cometidas el gobierno porteño contra adversarios políticos y familiares.