Cristina Kirchner se encamina por estas horas a su sexto procesamiento. Todo indica que será considerada por el juez Claudio Bonadio como la jefa de una asociación ilícita. Se trata de una calificación que ya tuvo en otras causas, pero que en esta oportunidad sería por considerar que lideró una banda que complotó, junto a ex funcionarios y empresarios, para recaudar sumas millonarias a través de los negocios con la obra pública.
Todo, en el marco de los cuadernos de las coimas, como se conoce el caso que estalló el 1º de agosto pasado con una serie de detenciones, tras la aparición de las anotaciones del ex chofer Oscar Centeno. Detrás de la de CFK, las calificaciones más graves serían las del ex ministro de Planificación Julio De Vido, y su segundo en la cartera, Roberto Baratta. A ambos, Bonadio les impondría la calificación de organizadores. En tanto que al resto de los 49 involucrados los alcanzaría la figura de “partícipes necesarios”.
En este tercer grupo hay nombres que van desde Angelo Calcaterra, ex dueño de Iecsa y primo hermano del presidente Mauricio Macri, hasta el de Jorge “Corcho” Rodríguez, Aldo Roggio o Carlos Wagner, ex titular de la Cámara Argentina de la Construcción. En todos los casos se esperan embargos millonarios, muy probablemente los más altos hasta ahora, dada la magnitud del dinero presuntamente involucrado en las maniobras.
Los procesamientos de los 52 involucrados se daban por descontados este viernes en Comodoro Py. La no concreción de la medida causó desconcierto en los Tribunales, donde no se descartaba que cuando se conozca la resolución pueda traer sorpresas.
Indicios. Por lo que se conoce hasta ahora, para la Justicia hay “indicios que ‘prima facie’ permiten sostener que, entre 2003 –cuando comenzó el primer gobierno kirchnerista– hasta el 9 de diciembre de 2015, cuando dejó el gobierno CFK, un grupo de funcionarios del Ministerio de Planificación, liderados por Baratta, ‘efectuaron las cobranzas’ llevados por Centeno y, tras quedarse con un porcentaje, las llevaban a otros personajes y estos ‘finalmente los derivaban a manos de los verdaderos beneficiarios de la maniobra ilícita: Néstor, Cristina y Julio De Vido’”.
Entre los involucrados que conocerán su situación legal entre los primeros dos días de esta semana, también están: el ex segundo de Iecsa, Javier Sánchez Caballero; el ex directivo de Isolux, Juan Carlos de Goycoechea; Enrique Pescarmona, de la Industria Metalúrgica que lleva su nombre y su directivo, Francisco Valenti; Aldo Roggio, de Benito Roggio e hijos; Carlos Wagner y Juan Chediak, empresarios y ex titulares de la Cámara Argentina de la Construcción; Gabriel Romero, del Grupo Romero, y su hombre de máxima confianza, Rodolfo Poblete. Todos ellos se convirtieron en imputados colaboradores del caso, para mejorar su situación procesal a futuro en el expediente. Algunos de ellos, como Sánchez Caballero, Poblete, Valenti y Wagner, también estuvieron detenidos por el caso y recuperaron su libertad tras haber llegado a sus respectivos acuerdos de “arrepentidos” con el fiscal Carlos Stornelli, que luego fueron homologados por Bonadio.
En otros casos, los “arrepentimientos” fueron para mejorar las situaciones de sus segundos, como en los casos de Calcaterra, Pescarmona y Romero, aunque también para evitar posibles fotos incómodas que los mostraran siendo detenidos con el avance de la investigación e incluso, apenas hablaran sus directivos, con la presión de estar tras las rejas y en pos de alcanzar sus libertades.
Situaciones. En tanto, otros imputados se fueron presentando espontáneamente a indagatoria tras encontrar sus nombres en los cuadernos, como fueron los casos de Hugo Eurnekian y Jorge “Corcho” Rodríguez.
Por otro lado, hay un grupo de empresarios que continúan detenidos. Entre ellos están Gerardo Ferreyra, de Electroingeniería; el ex titular de la Unión Industrial Argentina (UIA), Juan Carlos Lascurain; el responsable de la terminal de Omnibus de Retiro, Néstor Otero, y Raúl Vertúa, Carlos Mundin y Sergio Taselli.
Entre los ex funcionarios que esperan novedades sobre su futuro judicial están desde De Vido y López hasta Baratta, pasando por Nelson Lazarte, Rafael Llorens, Walter Fagyas y José María Olazagasti. Todos ellos –a excepción de López, que está en un lugar secreto– están detenidos en el penal de Ezeiza. Por otro lado, hay ex funcionarios kirchneristas que esperan su futuro en libertad. Entre ellos, Juan Manuel Abal Medina y su ex secretario, Martín Larraburu, Claudio Uberti, el ex juez Norberto Oyarbide y el miembro de la Auditoría General de la Nación (AGN), Javier Fernández.
Uno de los últimos en sumarse al “club de los arrepentidos” y cuya declaración y aportes promete abrir nuevas puntas de investigación es el financista Ernesto Clarens. Señalado como el “preferido” de Néstor Kirchner, Clarens es quien abrió la ruta del dinero en el caso, un camino que aunque recién comienza a desandarse ya promete muchas sorpresas.
Embargos y decomisos millonarios
La causa de los cuadernos de las coimas plantea, entre otras cosas, un enorme desafío a la hora de evaluar la posibilidad de embargar y decomisar dinero y bienes producto de los posibles ilícitos. Mientras se espera que junto con los procesamientos lleguen los embargos millonarios para los 52 involucrados en la causa, en el marco de la investigación ya se secuestró una importante cantidad de dinero, obras de arte y vehículos, entre otros elementos.
Entre ellos, a través de los más de 70 allanamientos que hubo desde que empezó el caso, ya se secuestraron 250 obras de arte valuadas en 42 millones y medio de pesos, autos –varios de ellos de alta gama– y billetes (6.350.000 en pesos, 1.245.000 en dólares y 235 mil euros). Además, ya todos los imputados tienen sus bienes inhibidos. Sin embargo, el mayor objetivo es encontrar el dinero mencionado. Los cerca de cuarenta cuerpos de la causa, entre los que se incluyen los resultados de tareas de inteligencia, cruces telefónicos y declaraciones, indican que hay mucho más por hallar, y hacia allí buscará avanzar la causa.
Lo que viene: de Szpolski a La Cámpora
Luego de resolver la semana próxima la situación de los 52 involucrados en la causa, Bonadio tendrá unos días para preparar las nuevas indagatorias. Se trata de las que están pautadas entre el 26 y el 29 de septiembre y que incluyen a los legisladores y referentes de La Cámpora: Juan José Ottavis, Eduardo “Wado” de Pedro y Andrés “Cuervo” Larroque, y el empresario Sergio Szpolski.
Sus citaciones fueron decididas por el magistrado federal a comienzos de este mes, luego de escuchar las declaraciones como arrepentido del ex secretario de Obras Públicas José López y la indagatoria de Martín Larraburu, ex secretario de Juan Manuel Abal Medina, quienes los involucraron con sus dichos.