La puesta en marcha del nuevo Consejo de la Magistratura comienza a definirse. Después del periodo en el que se recalentó el enfrentamiento entre el oficialismo, la oposición y la Corte Suprema, la situación comienza a normalizarse con la llegada del senador kirchnerista Martín Doñate y la diputada radical Roxana Reyes, propuestos por Cristina Kirchner y Sergio Massa. De esa manera, al menos hasta noviembre, el organismo judicial funcionará con la balanza inclinada en contra de los intereses judiciales del oficialismo y, particularmente, del kirchnerismo.
No es una novedad que a pesar de las intenciones cortesanas de lograr un equilibrio entre los estamentos político y técnicos, las filiaciones políticas, partidarias e ideológicas quedaron bien definidas en el nuevo mapa del organismo encargado de seleccionar y sancionar a los jueces y juezas.
En ese contexto, el kirchnerismo quedó en una clara desventaja que en principio perdurará hasta noviembre, cuando finalicen los mandatos actuales y se abra una nueva ventana de disputa política para renovar los cargos. Habrá que ver si para ese entonces sigue vigente el modelo actual de conformación impuesto por el fallo de la Corte o si el oficialismo logra imponer el proyecto que está en debate en el Congreso.
Pero en la actualidad el organismo está encabezado por el presidente del Máximo Tribunal, Horacio Rosatti, designado durante la presidencia de Mauricio Macri y con el posterior aval del Senado. Su desembarco en el Consejo lo situó como uno de los principales enemigos del kirchnerismo en la Justicia.
Las alineaciones de los consejeros y consejeras
La representación del Poder Judicial en el organismo la completan el juez federal de Tres de Febrero, Juan Manuel Culotta, un opositor al Gobierno que en 2017 estuvo en la mira del kirchnerismo por haber sido nombrado por el macrismo del Consejo como subrogante en el Juzgado federal con competencia electoral de La Plata.
Desde la entonces oposición reprochaban que no tenía antecedentes para el cargo y señalaban una supuesta vinculación a Macri a través de un abogado, los tres provenientes del colegio Cardenal Newman. El 2 de noviembre de ese año se supo que Culotta le pidió al Consejo que no renueve su subrogancia.
El estamento también está representado por la flamante consejera Agustina Díaz Cordero, jueza civil representante de la Lista Bordó de la Asociación de Magistrados (AMJFN), que representa los valores más tradicionales de la profesión. En el mapa del organismo se perfila en contra de los intereses y reformas que promueve el kirchnerismo para la Justicia.
Le siguen Alberto Lugones, camarista federal de San Martín y de buena relación con los representantes del oficialismo; y Ricardo Recondo, juez de la Cámara Nacional de Apelaciones en lo Civil y Comercial Federal y abiertamente opositor al Gobierno.
Entre los abogados, en tanto, está el cordobés Carlos Matterson, que piensa que la llegada de Rosatti al Consejo "le dará mayor operatividad a la Justicia", tal como le dijo a La Voz del Interior.
También Diego Marías del PRO, la recientemente asumida Jimena de la Torre, integrante de la Asociación Civil Bases Republicanas y ex funcionaria de la AFIP durante el macrismo; y Fernanda Vázquez, también recién asumida, que si bien no se reconoce como parte del oficialismo, ha recibido el apoyo público de la abogada Natalia Salvo, cercana al oficialismo; del diputado nacional y ex ministro de Salud bonaerense Daniel Gollán y de Rodolfo Tailhade, entre otros.
Los representantes del Congreso, la Academia y el Ejecutivo
Por parte del Congreso, el oficialismo suma en sus filas al senador Martín Doñate, que se sentará con sus pares Vanesa Siley, Mariano Recalde y María Inés Pilatti Vergara.
Mientras tanto, la oposición suma a la radical Roxana Reyes, ferviente crítica de Cristina Kirchner; al macrista Pablo Tonelli y a Silvia Giacoppo, radical jujeña ligada a Gerardo Morales. En el medio queda Graciela Camaño, del Interbloque Federal.
El representante del Ejecutivo es Gerónimo Ustarroz, primo hermano del ministro del Interior y dirigente de La Cámpora Eduardo "Wado" de Pedro. Cerca de las ideas oficialistas también están Diego Moleas y Paula Tolosa, en representación del estamento académico.
De ese modo, la balanza queda inclinada a favor de la oposición. Del esquema de 20 consejeros y consejeras de la Magistratura, hay 11 que no responden a los intereses del oficialismo y en particular de la vicepresidenta Cristina Kirchner: son Rosatti, Culotta, Díaz Cordero, De La Torre, Recondo, Matterson, Marías, Camaño, Giacoppo, Reyes y Tonelli.
Entre los nueve restantes, más alineados al oficialismo, se mantiene un núcleo duro kirchnerista integrado por Recalde, Siley, Ustarroz y Doñate.
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