El centro de cómputos que instaló Juntos por el Cambio en Costa Salguero fue un lugar clave: las principales figuras del espacio opositor iban y venían del VIP del búnker en busca de datos nuevos. Con el correr de la noche los triunfos en La Pampa, Chubut y Santa Fe aseguraron a la oposición sacarle el quórum propio a Cristina Kirchner en el Senado. Pero también con la otra batalla clave: la Provincia de Buenos Aires, donde a pesar de la remontada del Frente de Todos, Diego Santilli logró conservar una victoria histórica en las PASO con el PJ unido.
En Costa Salguero había un clima de emoción. El temor por los resultados en el conurbano bonaerense y una hipotética remontada cruzaron gran parte de la noche. “Estamos muy parejos, un punto abajo ellos”, decían los voceros oficiales.
Los datos se cruzaban: había WhatsApp con Chubut, donde Ignacio “Nacho” Torres derrotó al peronismo. Algo similar ocurría en La Pampa, donde la victoria por seis puntos fue una de las grandes sorpresas del día. Así, con el también seguro triunfo de Carolina Losada, el Senado se transformará un lugar de equilibrio de poder, un anhelo desde que Patricia Bullrich y luego el resto de JxC, iniciaron la campaña por los “cinco senadores”.
Martín Tetaz apostó 2 mil dólares por Leandro Santoro
Desde la Provincia había dudas: la remontada en varios municipios del FdT era fuerte. Por caso en San Martín y en general en la Primera Sección Electoral, en el norte y oeste del conurbano, donde en las PASO había ganado cómodamente JxC.
La victoria a nivel nacional preaugura unos diez puntos de diferencia, pero sobre todo el anhelo de la mesa nacional de JxC: lograr que el Congreso sea más equilibrado. Los radicales Mario Negri y Alfredo Cornejo fueron dos de las figuras que, temprano, se acercaron a Costa Salguero. “Duplicamos al FdT en Mendoza y ahora el Senado tiene equilibrio”, le dijo Cornejo a PERFIL.
Cornejo consiguió una victoria por casi 50% en su Mendoza natal. “Ganamos los cinco senadores que fuimos a buscar”, planteó Martín Tetaz.
Horacio Rodríguez Larreta, María Eugenia Vidal, Mauricio Macri y Patricia Bullrich estaban inquietos. De hecho, desde temprano, llegó Marcos Peña, el ex jefe de gabinete, a mirar los resultados. El festejo no se hizo esperar. La foto de unidad que deseaban se ratificó con una victoria nacional del frente opositor.
En el VIP de Costa Salguero se fueron sumando exministros. Guillermo Dietrich, ex ministro de Transporte y a cargo del voluntariado, o Francisco “Pancho” Cabrera, amigo de Macri y ex ministro de Producción. Hubo abrazos con los primeros resultados oficiales. En especial con la mirada nacional que suponía la victoria del frente opositor.
Por su lado, la ex vicejefa festejó. Aunque imaginaba llegando a 50%, logró ratificar el voto de las PASO y sumó un poco más. Fue una campaña muy dura para ella, tanto por el cambio de distrito como por las diferencias con el formato que tenían que tener las actividades proselitistas. Logró un buen vínculo con Tetaz y con Ricardo López Murphy. Con Paula Oliveto ya la tenían de sus años como gobernadora bonaerense.
Pero el gran ganador fue Larreta: logró imponer a Vidal y Santilli, y encaró con Martín Lousteau, varias giras por el Interior. Ahora el desafío será la unidad y pensar cómo encarar un 2023 que se abrió para la oposición.
