En los próximos días, la fiscal Viviana Fein recibirá el resultado de los exámenes toxicológicos que se desprenden de muestras obtenidas en la autopsia realizada a Alberto Nisman. La pericia, que tarda entre 15 y 20 días, genera expectativa en el expediente debido a que determinará si Nisman había ingerido o estaba bajo efecto de alguna sustancia cuando se produjo el disparo que terminó con su vida. Además, la titular de la Fiscalía Criminal de Instrucción Nº 45 contará con los aportes de los estudios histopatólogicos para completar el cuadro.
Estos análisis, realizados por el Cuerpo Médico Forense, serán remitidos al equipo liderado por el prestigioso forense Osvaldo Raffo, convocado a la causa por pedido de la jueza Sandra Arroyo Salgado. La ex mujer de Nisman no requirió una segunda autopsia pero, como parte querellante, solicitó esta semana que todo lo actuado sea enviado al perito.
Las últimas pruebas de laboratorio recibidas por la fiscal Fein el viernes ratifican el resultado preliminar de autopsia: no se hallaron rastros que puedan inferir la intervención de terceros. En el arma y la ropa de Nisman sólo se encontró su perfil genético.
Hasta el momento, no hay pruebas de que haya sido otro, sino Nisman quien se disparó en la cabeza con una pistola Bersa calibre .22, propiedad de Diego Lagomarsino, la última persona que lo vio con vida.
La falta de rastros de la deflagración en la mano de Nisman podría llevar a pensar en otra dirección, aunque los peritos lo adjudicaron al pequeño calibre del arma y ya está curso una contraprueba.
Lagomarsino declaró el lunes siguiente al hallazgo, de forma voluntaria. Dijo que solía visitarlo, para entregar o recibir pedidos de trabajo.
El informático de 39 años es el único imputado por haberle provisto el arma hallada en el lugar de su muerte.
La agencia Télam informó que la fiscal Fein tomó testimonio en los últimos días a los empleados de la UFI-AMIA para tratar de establecer la función del técnico en la fiscalía.
En tanto, personal policial realiza previsualización de las cámaras de seguridad del edificio para conocer quiénes circularon por el complejo en las horas previas a la muerte de Nisman y para confirmar las versiones dadas por Lagomarsino y la custodia del fiscal.
En los próximos días, cuando la querella designe a peritos de parte, comenzará también el vaciado de la información contenida en celulares, teléfonos y computadoras utilizadas por Nisman para reconstruir sus últimos días.