El segundo semestre comienza con los mismos desafíos con los que arrancó el año. Un relevamiento efectuado por PERFIL entre las principales consultoras del mercado reveló coincidencias en que habrá inflación alta aunque se desacelere y una suba del tipo de cambio oficial. Economistas de diferentes orientaciones prevén una suba de precios cercana al 140% anual, que el dólar oficial orillará los $ 470 a fines de 2023 y un año en que el PBI tendrá un desempeño desalentador con una caía cercana al 3%. Tensiones en el final de gobierno y por lo que vendrá en 2024.
Los salarios aumentaron pero perdieron contra la inflación en abril
Concluida la primera mitad del año, para el segundo semestre se abren varios frentes económicos para el Gobierno que, en medio de las elecciones y con Sergio Massa en un doble rol (ministro de Economía y candidato presidencial) quien buscará resolver o al menos amortiguar sus efectos negativos de cara a ser más competitivos en las urnas.
PERFIL realizó un relevamiento entre distintos economistas pertenecientes a las consultoras privadas más consultadas por el mercado sobre las principales claves para lo que resta de 2023. De ese sondeo surgió que serán mantener cierta paz cambiaria y con eso lograr que la inflación no se vuelva a acelerar, la renegociación con el Fondo Monetario Internacional que marcará la cancha en materia de reservas y de déficit fiscal, y evitar que la actividad se resienta lo máximo posible.
La inflación de junio se ubicaría por debajo del 7%
Inflación
A la espera de que aún se conozca el acto oficial de junio, que el Indec dará a conocer el próximo 13 del corriente mes, y que las estimaciones privadas prevén se ubique levemente por debajo del 7%, el primer semestre cerraría en el orden del 50%.
“La emisión monetaria se ‘esconde’ entre los pasivos remunerados, que están creciendo exponencialmente y ya representan el 270% de la base monetaria. Esto tiene un impacto negativo en las expectativas de inflación, ya que implica una posible emisión monetaria en el futuro”, explicó Lautaro Moschet, economista de la Fundación Libertad y Progreso.
“Dado este panorama, esperamos que la inflación siga aumentando y cierre el año 2023 en torno al 140%, con tasas mensuales que tendrán un mínimo del 7%”.
Por su parte, Soledad Pérez Duhalde, directora de operaciones de Abeceb, expresó que la inflación puede bajar un punto en algún mes pero si “promedia de julio a diciembre 7%, terminás el año en 131%, y en caso de que tengas un 8% promedio mensual el 2023 culminaría en el orden del 150%. Creo que estaremos entre esos valores, en torno al 140%”.
El PBI creció 1,3% interanual en el primer trimestre
Déficit fiscal
A su vez, del nuevo acuerdo con el que se llegue con el organismo internacional otro ítem que se debería recalibrar es la meta de déficit fiscal que era del 1,9% del PBI a fin de año.
Según cálculos de Ecolatina, el rojo primario acumulado en lo que va de 2023 roza los $ 1,27 billones, lo que representa el 0,7% del PBI. De esta manera, el Gobierno incumplió la meta acordada con el FMI para el primer semestre por $ 87 mil millones.
“Esto último implica que sería necesario mostrar un superávit primario en junio para poder cumplir con lo previsto originalmente, un desafío sumamente complejo dada la estacionalidad del gasto público y la caída esperada en los ingresos producto de la sequía”, señaló Santiago Manoukian, asesor económico de Ecolatina.
Hacia adelante, el panorama no es alentador. Si los ingresos continúan decreciendo en términos reales como hasta ahora y el recorte del gasto sigue con el mismo ritmo que se vio durante esta parte del año difícilmente se llegue al objetivo inicial del 1,9% del PBI de la meta planteada establecida con el Fondo Monetario y que está en revisión.
“Es probable que se encuentre en un valor entre el 2,5% y 3% del PIB. Si bien se vieron intentos de “esfuerzos fiscales” este último año, la caída de los ingresos repercutió fuertemente en el resultado primario. Es poco probable que podamos cumplir con las expectativas que tenía el Fondo y va a tener que ser un foco de acá a los próximos meses para poder, por lo menos, cambiar la predisposición que muestra el Gobierno en términos de esta meta. A esto hay que sumarle el proceso electoral que se contrapone a este objetivo una reducción real del déficit fiscal”, explicó Francisco Ritorto, economista de ACM.
Y agregó: “En términos de deuda pública, con las últimas licitaciones parece que los vencimientos más importantes lograron postergarse hacia el próximo año. Así que podemos decir que en el segundo semestre esta problemática entraría en un plano secundario”.
Actividad económica
En cuanto a este aspecto, se espera que la economía termine el año en recesión. El Estimador Mensual de Actividad Económica (EMAE) cayó en abril un 1,9% respecto a marzo. El índice se encuentra ahora en una caída del 1,4% respecto al promedio 2022.
Para María Castiglioni, economista de C&T, “probablemente el año finalmente cierre con menos recesión de la que creíamos hace un tiempo, tenemos ahora un pronóstico de más de 3% de caída para todo el 2023, pero era más negativo hace un tiempo atrás, sobre todo por el efecto de arrastre positivo que dejó el año pasado”.
Esto significa que el EMAE debe experimentar una caída adicional de entre 1,5 y 2% en el resto del año.
Dólar
Otro desafío que tiene el equipo económico es lograr cierta pax cambiaria, tratar de mantener calmado al mercado dado su política de mantener un tipo de cambio atrasado.
“Ante este contexto cualquier cimbronazo en materia política que genere una crisis de confianza y una caída fuerte de la demanda del peso, te va a impactar sobre un mercado cambiario”, sostuvo Natalia Motyl, economista de NM.
Y concluyó: “Para el dólar oficial que va a tener que acercarse a lo que son los números de inflación, va a ser totalmente insostenible, que sigue atrasado, va a estar rondando los 470 pesos y el blue a $ 800 a diciembre”.
Viaja una misión al FMI
La delegación técnica del Ministerio de Economía confirmó que emprenderá viaje hacia los Estados Unidos el próximo miércoles por la noche, con el objetivo de cerrar la renegociación con el FMI y conseguir el adelanto de los desembolsos necesarios para apuntalar las reservas. La misión confirmó que por ahora el ministro Sergio Massa no será parte de la comitiva, que será encabezada por el viceministro Gabriel Rubinstein y el jefe de asesores de esa cartera, Leonardo Madcur.
Desde el FMI afirmaron en un comunicado que “continuarán avanzando en su trabajo conjunto en los próximos días”, para acordar sobre “la quinta revisión del programa”.
El objetivo del Gobierno es conseguir unos US$ 10 mil millones, superior a los 4 mil que están previstos dentro del acuerdo existente.
