La relación del gobierno con el Poder Judicial y las denuncias de lawfare parecen ser los temas que más dividen las aguas dentro del Frente de Todos desde su regreso a la Casa Rosada. Luego de varios días agitados en materia judicial (las críticas del presidente Alberto Fernández a los jueces en su discurso ante la Asamblea Legislativa y el incendiario alegato de Cristina Fernández de Kirchner en la causa Dólar Futuro), este lunes 8 de marzo se conoció la próxima renuncia de la ministra de Justicia, Marcela Losardo. En ese contexto, el exministro de Planificación del kirchnerismo, Julio De Vido, estalló contra el jefe de Estado por su posible reemplazante y dijo sentir “vergüenza ajena” por los argumentos del mandatario.
Una vez confirmada la salida de Losardo del Ministerio de Justicia, Alberto Fernández admitió quienes tiene en mente para que la sustituyan. Los dos nombres que más suenan son el diputado del PJ-Río Negro, Martín Soria, y el también legislador Ramiro Gutiérrez, del Frente Renovador-Buenos Aires.
“Yo lo conozco a Martín mucho. Voy a decir algo que va a exacerbar muchos ánimos, pero su hermana votó el desafuero de De Vido. Los Soria no son precisamente eso. Lo hacen para generar inquina entre Cristina y yo”, consideró al ser entrevistado en C5N cuando le preguntaron por esos posibles sustitutos.
Pareciera que haber votado el desafuero a un compañero perseguido sin haber siquiera sido indagado sería un mérito para designar al hermano como sucesor de la ministra Losardo, esto define la miserabilidad inconmensurable de @alferdez. pic.twitter.com/1UssVLbAbO
— Julio De Vido (@JulioDeVido) March 9, 2021
El mandatario se refirió a la diputada María Emilia Soria, que en octubre de 2017 participó de la sesión en la que se votó el desafuero al ex funcionario. Ese día una gran parte del bloque FPV-PJ no bajó al recinto al argumentar que el pedido de los jueces Luis Rodríguez y Claudio Bonadio, en el marco de distintas causas por presuntos delitos de corrupción para poder proceder a su detención, respondía a una "persecución política" contra el legislador.
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No obstante, hubo seis diputados de esa bancada que emitieron su sufragio a favor de la medida: la chubutense Ana Llanos, la tucumana Miriam Gallardo, los sanjuaninos Ramón Tovares y Sandra Castro y los rionegrinos Luis Bardeggia y María Emilia Soria, hermana del que podría ser el próximo ministro de Justicia.
VERGÜENZA AJENA LA POBREZA RETÓRICA DE SU JUSTIFICACIÓN QUE AFIANZA NUESTRA ESTIGMATIZACION DANDO PIEDRA LIBRE DEL PODER EJECUTIVO A NUESTRA PERSECUCION JUDICIAL.
— Julio De Vido (@JulioDeVido) March 9, 2021
Ese tramo de la entrevista, como predijo el jefe de Estado, molestó a algunas personalidades, entre ellas De Vido, quien compartió el video del momento en Twitter. “Pareciera que haber votado el desafuero a un compañero perseguido sin haber siquiera sido indagado sería un mérito para designar al hermano como sucesor de la ministra Losardo, esto define la miserabilidad inconmensurable de Alberto”, escribió el ex ministro K.
De Vido prosiguió con sus críticas: “El mérito de Martín Soria para ser Ministro de Justicia sería que es anti kirchnerista, según Alberto Fernández, el silencio compañeros se transformará en complicidad”. “Vergüenza ajena la pobreza retórica de su justificación que afianza nuestra estigmatización dando piedra libre del poder ejecutivo a nuestra persecución judicial”, agregó.
Las críticas a Alberto Fernández por su gestión de la Justicia
Desde que inició su Gobierno que muchos referentes kirchneristas cuestionan al Presidente por su actitud pasiva ante el funcionamiento del poder judicial y a aceptar que existen “presos políticos” en la Argentina. La referente detenida de la Tupac-Amaru, Milagro Sala, o la titular de Madres de Plaza de Mayo, Hebe de Bonafini, pidieron más implicación por parte del mandatario en esta área.
En febrero del 2020, hubo una fuerte interna dentro del Frente de Todos por los ex referentes kirchneristas que se encuentran detenidos por causas de corrupción. El jefe de Gabinete, Santiago Cafiero, dijo en ese entonces que no había “presos políticos” sino “detenciones arbitrarias” y el mandatario apoyó esas expresiones.
Sin embargo, en las últimas semanas, la actitud de Alberto Fernández cambió y sus declaraciones empezaron a apuntar contra la Justicia, más en la línea con su vicepresidenta, Cristina Kirchner. Las expresiones más duras las realizó durante su discurso ante la Asamblea Legislativa, donde aseguró que enviará varios proyectos al Congreso para una reforma profunda del poder judicial.
B.D.N./FF
