POLITICA

Las inesperadas consecuencias de la muerte del fiscal Nisman

Marchas en todo el país, desclasificación de agentes secretos y cambios en la causa AMIA. Algunas de las repercusiones que <strong>sacuden la política argentina</strong>.

La muerte de Nisman desató inesperadas consecuencias.
| Cedoc

La inesperada muerte del fiscal Alberto Nisman sacudió el tablero político y manchó de sangre la puja por el poder que mantienen distintas facciones de la Secretaría de Inteligencia. Además, obligó a los distintos poderes del Estado a tomar cartas en el asunto, desde legisladores opositores y oficialistas, hasta la Corte Suprema de Justicia, y aceleró la denuncia que él mismo impulsara contra la presidenta Cristina Fernández de Kirchner.

Conmoción social. Un día después de la aparición del cuerpo sin vida del fiscal, miles de personas marcharon en Plaza de Mayo, Olivos, Rosario, Córdoba, Mendoza y San Juan, entre otros distritos, en reclamo de justicia y en respaldo de la gestión de Nisman al frente de la causa AMIA y a la denuncia que había efectuado a la presidenta Cristina Fernández de Kirchner.

Habilitaron la feria judicial. Pese a que la jueza María Servini de Cubría había decidido no darle tratamiento a la denuncia de Nisman durante la feria, luego de conocida su muerte se aceleraron los tiempos. El juez Ariel Lijo llegó de urgencia a Buenos Aires y puso a resguardo toda la documentación que Nisman guardaba en su fiscalía.

Reacción oficial. Desde Nisman se presentó en Comodoro Py para denunciar que el un grupo de funcionarios oficialistas negoció la impunidad de Irán en la causa AMIA por orden de la Presidenta, nadie había salido a desmentirlo. Cuando la primera mandataria cumplía su cuarto día de silencio se conoció la muerte del fiscal. El lunes Cristina publicó una carta donde apunta, sin mencionarlo, al exespía Jaime Stiuso y a los enfrentamientos entre sectores de inteligencia. Andrés Larroque, otro de los imputados, se mostró públicamente pero no negó ni aceptó la denuncia de Nisman.

Desclasificación de agentes. Otro de los pedidos de Nisman que se cumplieron después de su muerte fue la posibilidad de dar a conocer nombres de espías secretos que estaban involucrados en la denuncia. El Gobierno ordenó desclasificar datos de agentes. El titular de la Secretaría de Inteligencia, Oscar Parrilli, pidió el lunes los nombres de los agentes que aparecen identificados en la denuncia de Nisman para levantar el secreto y poner a disposición de la justicia la información. 

Se conoció la identidad de los espías. Luego de que la Secretaría de Inteligencia levantara el secreto sobre una serie de conversaciones telefónicas implicadas en la causa AMIA, se conocieron más detalles. Nisman nombró en su denuncia a "Ramón Allan Héctor Bogado" como el supuesto contacto informal con los iraníes, el cual es identificado por el matutino como el espía de la SIDE que era el contacto paralelo entre el Gobierno y el hombre de confianza de Teherán en Buenos Aires Jorge "Yussuf" Khalil.

Publicaron la denuncia completa. Ya sin el impedimento de los secretos de Estado, por tratarse de espías pertenecientes a la secretaría de inteligencia, el Centro de Información Judicial dio a conocer las 300 páginas de la denuncia de Nisman, donde se citan textualmente las escuchas telefónicas que prueban las negociaciones ocultas.

Su exmujer será querellante. La jueza Sandra Arroyo Salgado, exesposa de Nisman fue aceptada como querellante en la causa que investiga la muerte de su marido. La noticia la confirmó la fiscal Fein esta tarde. Salgado se presentó hoy a declarar ante la Justicia y si bien en un primer contacto con la prensa pidió "no hacer conjeturas", luego dijo que descartaba la hipótesis del suicidio.

Cambios en la causa AMIA. Alberto Gentili, hombre de extrema confianza de Nisman, quedó a cargo de la Unidad Especial de investigación hasta el 31 de enero, en categoría de subrogante. La procuradora Alejandra Gils Carbó nombrará en febrero al reemplazo, por lo que los cambios en la investigación serían inevitables.