En 1992 el entonces gobernador Eduardo Duhalde inauguró los Torneos Juveniles Bonaerenses y de la Tercera Edad con 149.000 finalistas, entre ellos un prometedor Emanuel Ginóbili. En esos años, los vencedores del básquet obtenían viajes a California. Veinte años después, el panorama es otro: para los jóvenes no hay viajes al exterior, ni se desarrollarán las esperadas finales de Mar del Plata, clásico ya del deporte y la cultura provinciales.
Los Juegos Buenos Aires la Provincia -así se denominan desde 2010- reemplazaron a los Torneos Bonaerenses, en un formato similar al de los Torneos Evita a nivel provincial. Este año, sólo llevarán del 13 al 17 de octubre a los adultos y mayores a "La Feliz". En la zona sur del Gran Buenos Aires, colegios criticaron a los organizadores por no avisarles en todo el año de los cambios, ni de la cancelación del viaje final a Mar del Plata.
Ahora, ¿Por qué los chicos no irán este año al evento deportivo por el que se entrenan durante meses y que promocionó, entre otros, a Luis Scola o los hermanos Milito?
Voceros de la Secretaría de Deportes bonaerense señalaron a Perfil.com que en 2013 "sólo habrá finales regionales" para los juveniles, dado que "a principio de año por motivos climáticos, por las inundaciones, se fueron postergando las etapas iniciales y por eso se aplica este año otro formato".
La Provincia la que cubre todos los gastos de juveniles y ancianos. Ante la consulta sobre si la suspensión de las finales de Mar del Plata responde a recortes presupuestarios por la campaña electoral, el área deportiva de la gobernación de Daniel Scioli negó esa hipótesis, argumentando que sólo se trata de "otro formato".
Con una particular definición, los Torneos Bonaerenses apuntan a ser una "barrera de contención de los vicios o males sociales que acechan" a jóvenes de entre 12 y los 18 años, "como ser el alcoholismo, la drogadicción (...) la prostitución precoz y la delincuencia juvenil", según señala en su web la Secretaría de Deportes provincial que dirige Alejandro Rodríguez.
Los reclamos. Los colegios públicos y privados, incluidos los orientados a asistir a chicos con capacidades especiales, son contactados desde principio de año por el desarrollo de las primeras etapas de las 80 competiciones deportivas y culturales. En 2012, hubo más de un millón de participantes. Cada escuela llevó, de promedio, 50 alumnos a las tradicionales finales marplatenses.
Este año, escuelas de Lomas de Zamora, Lanús y Avellaneda aseguraron a Perfil.com que no fueron notificados de ningún cambio por parte de las autoridades bonaerenses, ni siquiera de las etapas iniciales.
"Los colegios especiales organizamos nuestras 'finales' en el Polideportivo de Lanús para mantener el espacio cultural y deportivo, que es muy importante para los chicos", explicó a Perfil.com la directora de una escuela especial de la zonar sur del Gran Buenos Aires. "Este año hay elecciones y 'oh, casualidad', se suspendieron estos torneos. Salvo una emergencia grave, no se justifica su cancelación", reclamó.
Esta directora -que pidió preservar su identidad- destacó un punto que denota la difícil realidad de los 'atletas' de barrios carenciados: "Muchísimos chicos vieron el mar por primera vez en Mar del Plata gracias a los Torneos Bonaerenses". "Es una actividad muy esperada para ellos, no sólo para los que tienen discapacidad, sino para todos”, insistió.
