Un tumulto de gente se agolpó luego de que se corriera la voz: gritos, histeria y guardaespaldas eran parte de la escena. El rumor de que la Reina del Pop iba a estar ahí, en Roma, había corrido temprano permitiendo la aglomeración de fans. Y así fue. Esta semana, sin previo aviso oficial, Madonna apareció cerca del Coliseo para supervisar los preparativos de la apertura de una nueva filial de su cadena de gimnasios de lujo, Hard Candy Fitness. Cuando arribó al evento, con un vestido negro que realzaba su figura, los flashes no dejaron de dispararse. Sin embargo, pocos prestaron atención a su vestimenta porque lo que realmente brilló fue su sonrisa. Es que la cantante se unió a la tendencia grill y aprovechó la ocasión para lucir sus nuevos brackets realizados en oro y diamantes. El llamativo top negro con encaje pasó desapercibido al lado de su sonrisa. El extravagante accesorio dental que llevó lo superó ampliamente. Se trata de fundas de oro de la mejor calidad con incrustaciones de 24 diamantes que abarcan sólo la parte visible de la dentadura de la cantante. Este diseño desmontable realizado por la firma Cap Master se llama “diente libre” y permite dejar al descubierto las piezas dentales propiamente dichas. Pero la Reina del Pop no es la única estrella que adoptó esta tendencia. Anteriormente lo hizo Justin Bieber, quien tiene seis prótesis removibles con diamantes que en 2011 le diseñó el joyero Ben Baller. Miley Cyrus también tiene tres modelos distintos que suele intercambiar, uno de ellos es de platino y oro, como se ve en el clip de la canción We Can’t Stop. Rihanna, Chris Brown, Kanye West, Marilyn Manson y Johnny Depp son otros de los famosos que tienen respectivos accesorios bucales premium. Y pese a que los grills se hicieron famosos gracias a la cultura del hip hop, hasta el nadador olímpico estadounidense Ryan Lochte tiene uno, que lució al momento de recibir la medalla de oro tras ganar los 400 metros combinados en los Juegos Olímpicos 2012. El deportista tenía un aparato que cubría sus dientes con diamantes. Los costos de los grills son muy variables. Si se utilizan piedras preciosas pueden, como en el caso de los que tiene Madonna, tener un valor cercano a los 100 mil dólares.
