En un tiempo no tan lejano, las críticas entre CEOs –y empresas– competidores se daba a través de voceros mediáticos, operaciones de prensa gestionadas por agencias de comunicación. Ahora, algunos lo hacen a través de redes sociales.
Ex amigo y socio de Elon Musk afirma que el sudafricano odia a Sam Altman.
Elon Musk encabeza esta tendencia y, otra vez, apuntó directo contra un objetivo que casi parece es su obsesión: Sam Altman, el CEO de OpenAI. Y también criticó a Apple. “Apple se está comportando de una manera que hace imposible que cualquier empresa de IA (inteligencia artificial) que no sea OpenAI llegue al puesto número uno en la AppleStore; esto constituye una violación antimonopólica inequívoca. AI (N de R: empresa de Musk) tomará acciones de inmediato”, posteó Elon Musk en su red social X.

Sam Altman desestimó a relacionistas públicos y, acostumbrado a las críticas de su competidor, entró en la arena de X y le respondió: “Es increíble lo que dice (Elon Musk) teniendo en cuenta lo que he escuchado sobre lo que Elon hace para manipular X y así beneficiarse tanto él como sus empresas, y dañar a sus competidores y a las personas que no le caen bien”.
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Y para fundamentar sus dichos, Sam Altman linkeó a una publicación donde hay artículos que, por ejemplo, confirmaban que había Elon Musk creado un sistema especial para que X dé ubicación preferencial a todos sus posteos.
“Mentiroso”, respondió Musk a Altman, y éste último redobló la apuesta y lo desafió a firmar una declaración jurada donde dijera que nunca ordenó cambios en el algoritmo de X para perjudicar a sus competidores o beneficiar a sus compañías. Mientras tanto, Tim Cook, CEO de Apple, se mantiene ajeno a las críticas de Musk.
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Sin tregua
Estos choques ya tuvieron instancias judiciales previas. OpenAI demandó a Elon Musk –su excofundador– por librar una “campaña implacable” para dañar la imagen de la misma al ver que el éxito corporativo se había logrado sin él.
OpenAI alegó que Musk “convirtió en proyecto personal destruir OpenAI y crear un competidor directo que se hiciera con el liderazgo tecnológico, no para la humanidad, sino para él”. Previamente, Musk había acusado a OpenAI de traicionar su misión fundacional: ser una empresa de códigos abiertos.
EI/fl