En cada historia de trasplante hay amor, esperanza, dolor, pérdida, y un denominador común: la necesidad de donar para que la vida y la muerte cobren sentido. El compromiso de la donación de órganos no cesó, incluso, en medio de la pandemia. Desde marzo de 2020 se realizaron 483 procesos de donación de órganos y 177 de donación de tejidos.
Según la información publicada por el Ministerio de Salud de la Nación en mayo de 2021, el resultado de cada donación en pandemia permitió que 1.276 personas en lista de espera recibieran un trasplante de órganos y 805 un trasplante de córneas.
Uno de ellos fue Branco Jáuregui. "Tuti", como lo apodan sus conocidos y amigos, hoy tiene 23 años, es estudiante de profesorado de Educación Física y pasa sus tardes jugando al fútbol en el club de su pueblo en Carreras, Santa Fe. Pero su rutina se vio alterada el 27 de enero de 2021 cuando, a los 21 años, le diagnosticaron una miocarditis severa y le dijeron que solo sobreviviría con un trasplante de corazón. Desde octubre de 2020, su corazón había comenzado a apagarse y tras fuertes síntomas físicos, la intervención tenía que ser inmediata. La desesperación de su familia llevó a la búsqueda de un corazón que le salvara la vida a Branco.
Un corazón para Tuti
En la soledad de un quirófano y la distancia física que lo separaba de su familia, debido al aislamiento que estaba vigente en el país, Tutti estuvo diez días en lista de espera. Después de ese breve pero agonizante tiempo, la noticia que tanto esperaba Branco tocó su puerta: había un donante compatible. El corazón para Tuti fue donado por los padres de Andrés, un joven salteño de 16 años, que pese a la tristeza de su pérdida, pudo dar esperanza de una nueva vida para Branco.
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LEY JUSTINA
Uno de los avances más significativos para el largo camino burocrático que acompaña la donación de órganos fue la Ley Justina (Nro 27.447/2019) reglamentada en enero de 2019, que dispone que
“toda persona mayor de 18 años es donante de órganos o tejidos salvo que haya dejado constancia expresa de lo contrario”
Así, las personas que deciden no donar sus órganos, se deben inscribir en un registro de no donantes.
La ley nació como proyecto de los padres de Justina Lo Cane en homenaje a su hija, una chica de 12 años que falleció el 22 de noviembre de 2017 a la espera de un corazón.
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Cada año, en el Día Nacional de la Donación de órganos y Tejidos el Ministerio de Salud de la Nación, el INCUCAI junto a los 24 organismos jurisdiccionales de ablación e implante de todo el país difunden el mensaje de concientización que destaca: “La concreción del trasplante es posible gracias a la participación de la sociedad representada en el acto de donar, a la intervención de los establecimientos hospitalarios y a los organismos provinciales de procuración pertenecientes al sistema sanitario argentino”.
¿Por qué hay un Día de la Donación de Órganos y Tejidos?
El 30 de mayo se propuso como Día Nacional de la Donación de Órganos y Tejidos debido a el nacimiento del hijo de la primera paciente que dio a luz después de haber recibido un trasplante hepático en un hospital público, este acontecimiento representa la posibilidad de vivir y dar vida después de un trasplante.
La donación de órganos representa un cambio vital tanto en la historia de la medicina como en la sociedad completa. El mes de mayo se presenta como una oportunidad para estimular la conciencia sobre el valor de la donación de órganos y tejidos para trasplante y reflexionar acerca de un problema de salud que afecta a numerosos ciudadanos del país.