La fiesta más alegre del calendario judío se vive como un carnaval y tiene un origen "digno de una telenovela".
Purim |
AFP
Marcelo Raimond
La noche del miércoles comenzó Purim, la festividad judía más alegre del calendario. Esta fecha se vive como un carnaval y, quienes lo celebran, se disfrazan para festejar.
En las sugerencias de los sabios, a los judíos se les sugiere emborracharse en esta fiesta para disfrutar con alegría. Incluso sugieren el nivel de emborrachamiento: suficiente para estar alegre y no poder diferenciar entre el bien y el mal.
Esta fiesta tiene un origen "digno de una telenovela". Está basado en el libro de Ester, que es uno de los libros del Antiguo Testamento, del Tanaj, la parte judía de la Biblia. Como toda las historias judías, es trágica, pero tiene un final relativamente feliz.
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Hacia el siglo cuarto antes de la era cristiana, muchos israelitas vivían exiliados en Persia. En esa época, había en Persia un rey que se llamaba Asuero (Ajashwerosh para los judíos). En su tiempo vivía también Mordejai, que era jefe de la comunidad judía y que tenía una prima a la que crió como si fuera su hija. La chica era huérfana y muy linda, y se llamaba Ester.
Asuero armó una fiesta para exhibir su poder y le pidió a su esposa Vasti que se presente. Ante la negativa de ella, que estaba organizando en simultáneo una fiesta para mujeres, un consejero le avisa a su esposo y este la manda a ejecutar.
Cuando muere la pobre Vasti, Asuero se da cuenta que tiene que conseguirse una nueva mujer, entonces organiza una suerte de "certamen de belleza". Quien gana es Ester, la hija adoptiva de Mordejai, a la que su tío le advierte que no diga que es judía.
Ester se casa con Asuero y se convierte en reina. Un día, se entera que hay un complot para matar a todos los judíos, organizado por Amán, otro de los consejeros del rey. La flamante reina le advierte de esto a su tío y, a partir de ahí, desarman el plan y matan a Hamán y a todos sus hijos.
Purim, entonces, surge como una forma en la que Ester y Mordejai decidieron festejar el milagro de haber descubierto el complot y haber salvado al pueblo judío. La fecha en que se celebra Purim es el 14 del mes judío de Adar (que suele coincidir en marzo), que es la fecha en que Hamán había decidido matar a todos los judíos.
