"Es una decisión política", aseguró el flamante jefe de la Policía Bonaerense, Juan Carlos Paggi, quien asumió en lugar de Daniel Salcedo. La llegada del ex superintendente de Coordinación Operativa de Seguridad se apresuró después del asesinato del teniente Aldo Garrido en San Isidro.
Paggi manifestó que su llegada como jefe de la Policía Bonaerense se da en el marco de "un recambio natural", luego de que Salcedo "presentó el retiro". En diálogo con el canal C5N, reprudicido por la agencia DyN, el nuevo director de la fureza seguridad provincial recalcó que el camino más acertado para combatir a la delincuencia es "anticiparse" al delito.
"Tenemos que dar una respuesta honesta y eficaz contra el delito", añadió Paggi, quien admitió la falta de más efectivos en la Fuerza para combatir la inseguridad. Más tarde, Salcedo reveló que tomó la decisión de dejar el cargo "en diciembre", y que la iba a concretar ayer, pero postergó su pedido "hasta el esclarecimiento" del crimen del teniente Garrido,
De esta manera, Salcedo descartó que su salida obedezca a una "limpieza". El ex jefe de la Bonaerense además remarcó que el arribo de Paggi al frente de la Fuerza supone un "recambio más que natural", por lo que habrá "continuidad" en las políticas de lucha contra el delito.
Daniel Scioli dijo que la medida se tomó en base a la "permanente adaptación que se hace de los recursos humanos y logísticos" de la Policía. "Son distintas etapas de un plan que tiene como eje central la lucha contra la droga, la recuperación de la confianza entre la ciudadanía y la policía, articular con la Justicia, mejorar el espacio público y trabajar desde la prevención", aseveró el gobernador.
