INTERNACIONAL

Un sacerdote paraguayo asegura que el Papa lo "protegió" de La Triple A

"Me dijo que me vaya, que me iban a matar", contó el jesuita José Luis Caravias.

José Luis Caravias, el sacerdote al que Bergoglio "le salvó la vida", ahora vive en la congregación Cristo Sol de Paraguay.
| JL Caravias

Tras conocerse que Jorge Bergoglio sería el sucesor de Pedro, el kirchnerismo reflotó un viejo debate en torno al rol que el ahora Sumo Pontífice llevó adelante durante la última dictadura. Ahora, un sacerdote jesuita asegura que el exarzobispo de Buenos Aires lo protegió de La Triple A.

En mayo de 1972, y perseguido por la dictadura de Alfredo Stroessner, el jesuita José Luis Caravias tuvo que abandonar Paraguay para radicarse en Chaco. Las cosas no fueron distintas en el país: otra vez perseguido, Caravias se reunió con Bergoglio, quien "lo protegió" y le advirtió que "le habían decretado la muerte".

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En Chaco, Caravias comenzó a trabajar en el campo y creó un sindicato agrario. Fue entonces cuando La Alianza Anticomunista Argentina -La Triple A- se fijó en él.

"Venían con armas, nos azotaban", recuerda el sacerdote, en una entrevista con el medio paraguayo Ultima Hora. "Entonces viajé a Buenos Aires a reunirme con un provincial, porque necesitaba el apoyo de alguna institución", contó. El "provincial" resultó ser, ni más ni menos, que el ahora sumo pontífice, Francisco.

El encuentro. "Me brindó todo su apoyo y me puse a trabajar con paraguayos que habitaban las villas de Buenos Aires", explicó. "Pero la persecusión seguía y, llegado el momento, Bergoglio me dijo que La Triple A había decretado la muerte de tres sacerdotes: (Francisco) Jalics, (Orlando) Yorio y el tercero era yo".

El responsable de los jesuitas en Argentina le recomendó que abandonara el país, "poque a diferencia de Paraguay, en Argentina sí mataban a sacerdotes".