POLITICA
Este miércoles se define su expulsión

El peor julio, De Vido

El exministro vive horas decisivas. Una novela que se comenzó el 4 de julio y mañana tendrá un desenlace incierto, aunque confía en salir airoso. Por ahora el oficialismo no consiguió los votos necesarios para sacarlo de la Cámara de Diputados.

De Vido Lonely
De Vido | CeDoc
El diputado Julio De Vido está a 24 horas de tomar aire de nuevo. Es que mañana Cambiemos buscará expulsarlo de la Cámara de Diputados pero por ahora sus operadores del Congreso no consiguieron los votos necesarios y la estrategia de confrontación con la oposición los puede dejar con las manos vacías.

Para el exministro de Planificación sería una bocanada de aire fresco mientras enfrenta las numerosas investigaciones en su contra por causas de corrupción. Desde que el 4 de julio el fiscal Carlos Stornelli pidió su desafuero y detención, cada minuto de De Vido se vivió como un reality show. Paso a paso, un mes donde hasta fue noticia su cuñado prófugo:

4 de julio. El fiscal federal Carlos Stornelli pidió el desafuero y la detención por un presunto desvío de fondos en el frustrado proyecto de la minera Río Turbio, la central térmica de Santa Cruz. La medida también recayó sobre el ex subsecretario de Coordinación y Control de Gestión del ministerio, Roberto Baratta, quien era el segundo de Julio De Vido. El juez de la causa, Luis Rodríguez, debe decidir el curso de la investigación.

5 de julio. De Vido fue el gran ausente de la sesión de la Cámara de Diputados tras el pedido de desafuero y detención. El recinto retomó la discusión de la Ley de Responsabilidad Empresaria, que fue aprobada "en general", pero que pasó a cuarto intermedio luego de darle el visto bueno artículo por artículo.

7 de julio. El juez federal Luis Rodríguez dispuso que “no hay el estado de sospecha suficiente” que justifique un llamado a indagatoria en la causa por las malversación de casi 265 millones de pesos en la causa Río Turbio.

9 de julio. El diputado se defendió: “Jamás me protegí en los fueros”. Un día después de que la Justicia rechazó pedir su desafuero, el ex ministro volvió a hablar de “persecución”. Avisó que denunciará a Carrió y tildó de “corrupto” al macrismo.

10 de julio. El juez Claudio Bonadio procesó a De Vido por el delito de defraudación contra la administración pública por el modo en que se repartieron los subsidios a los colectivos del Área Metropolitana y a algunas líneas del interior del país. Según fuentes judiciales se detectó un perjuicio para el Estado por unos 609 millones de pesos. De ese total 403 millones corresponden a la entrega de dinero en efectivo a las empresas y 205 millones en gasoil subsidiado para los colectivos.

11 de julio. La Cámara Federal reabrió otra investigación penal por presuntas irregularidades en Río Turbio, en este caso por el pago de sobreprecios en la construcción de una central termoeléctrica. 

12 de julio. El presidente de la Nación, Mauricio Macri, desafió al diputado “a decir qué tiene para contar”, felicitó al fiscal que lo citó a Tribunales para ampliar la amenaza que habría hecho en privado

18 de julio. Se trató en Comisión de Asuntos Constitucionales la posibilidad de expulsar a De Vido. La resolución quedó en suspenso una semana para que el exministro pueda hacer su descargo. 

24 de julio. El Gobierno ofreció formalmente una recompensa de $250.000 para quienes "brinden datos útiles que sirven para dar con la aprehensión" de Claudio Minnicelli, cuñado del diputado, quien se encuentra prófugo de la Justicia en el marco de la causa que investiga la denominada "mafia de los contenedores" que operaba en el puerto de Buenos Aires.

25 de julio. Dictamen en comisión. Pasa al recinto el pedido de destitución a Julio De Vido.