Para este jueves a las 10 hora de Roma, las 5 de la mañana en Buenos Aires, está pautada la cita entre Alberto Fernández y el Papa Francisco.
La audiencia, que se celebrará en el Estudio del Aula Paulo VI del Vaticano tendrá mucho de simbólica, aunque esta vez el objetivo será concreto para el Presidente: utilizar la influencia de su compatriota para avanzar en acuerdos para renegociar la deuda con el FMI y el Club de París.
Con este encuentro, el jefe del Estado intenta utilizar la carta papal para abrochar la gira europea que arrancó el domingo en Portugal, siguió por España y Francia, y culmina en Italia y la Santa Sede. El objetivo que se trazaron Fernández y su ministro de Economía, Martín Guzmán, se viene cumpliendo hasta el momento, según confiaron a PERFIL integrantes de la comitiva oficial.
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Alejado por unos días de los problemas domésticos, Fernández disfruta de su gira por cuatro países europeos. La reunión de este jueves en el Vaticano es la que lo tiene más entusiasmado. "Francisco tiene un compromiso muy grande con la Argentina", repite Fernández en privado.
Y sabe el mandatario argentino que su influencia puede resultar decisiva para convencer a las autoridades del FMI y del Club de París de refinanciar los vencimientos de deuda. La buena relación que tiene también con el presidente norteamericano Joe Biden (católico y admirador de Francisco) también puede resultar un puente para llegar a un acuerdo. "Siempre nos ayudó", agrega el Presidente.
La liberalización de las patentes de las vacunas está en la posible agenda bilateral. El Gobierno celebró que Bergoglio también haya suscripto a la postura sobre el acceso universal a las vacunas. Justamente, previo al inicio de la gira, el Papa pidió la semana pasada por la distribución equitativa a los países más necesitados.
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"Yo trato de cuidar al Papa", repite Fernández sobre su relación con Bergoglio. Ese "cuidado", según el mandatario, incluye no inmiscuir su nombre en la política argentina. El mandatario cuenta que esta vez tampoco le pedirá que visite el país.
Una de las fuertes diferencias con la reunión de enero del año pasado en el Vaticano estará marcada por la sanción de la ley del aborto a fines del año pasado en la Argentina. Antes de asumir la presidencia, Fernández le planteó: "voy a avanzar con este tema (la legalización del aborto) y no quiero que eso lastime nuestra relación".
La queja oficial sobre el aborto llegó de parte del secretario de Estado vaticano, el cardenal Pietro Parolin. Sin embargo, el Presidente asegura que en todas las conversaciones privadas que mantuvieron por teléfono en los últimos meses, nunca volvió a plantearse el tema, ni hubo de parte de Francisco ningún reproche.
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El fútbol siempre se cuela en sus charlas. Esta vez, el Presidente le lleva a Francisco el saludo del campeón del mundo del 78 Jorge Olguín. El ex futbolista comparte algo en común con los protagonistas de la cita vatiacana. Jugó en San Lorenzo, club de Francisco, y también en Argentinos Juniors, cuadro del es hincha Fernández. "Mandale saludos de mi parte", le dijo Olguín hace unos días a Fernández cuando visitó la Quinta de Olivos.
También en el Vaticano, Fernández podría encontrarse el viernes con Kristalina Georgieva, en el marco de un seminario internacional sobre finanzas. La comitiva oficial extendió por un día la gira (la vuelta será el sábado), por lo que se especula que esa estrategia sólo obedece a la posible reunión con la titular del organismo de crédito.
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