Rematan autos de lujo de narcos: un viejo dueño apareció con una llave y para qué se usarán los $450 millones recaudados

La primera subasta de autos y motos de alta gama secuestrados a narcotraficantes en Santa Fe recaudó más de $450 millones este jueves en el Salón Metropolitano de Rosario. En un giro insólito, uno de los antiguos dueños se presentó con la llave de uno de los vehículos e intentó venderlo al mejor postor, pero fue retenido en el acto.

La subasta organizada por la Agencia Provincial de Registro, Administración y Destino de Bienes y Derechos Patrimoniales (Aprad) contó con la participación del gobernador de Santa Fe, Maximiliano Pullaro, quien promovió la idea con el objetivo de debilitar a las organizaciones criminales. 

Durante la jornada, se remataron 21 autos, 6 pick-ups, 12 motos y un auto de colección, ante un total de 4.500 inscriptos, y todos los lotes fueron vendidos. El vehículo por el que más se pagó fue el 5, un Mercedes Benz A45 AMG de 2017, cuyo precio final ascendió a $44.000.000. En segundo lugar, se ubicó el lote 10, una Dodge RAM 1500 de 2019 ($44 millones).

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El tercer puesto lo compartieron el lote 6 ($40 millones) otro Mercedes Benz blanco, pero de 2013; el 40 ($33 millones), el Triumph verde de fines de la década del '50, cuya descripción decía "no arranca/no posee batería"; y el lote 2 ($31 millones), una Toyota Xilux gris de 2019 con poco menos de 9.400 kilómetros recorridos.

Los bienes de alta, mediana y baja gama, tuvieron como valor base entre un 40% y un 60% del precio de mercado y de ahí fueron rematados hasta donde los postores estuvieron dispuestos a llegar. Es así que uno de los Mercedes Benz, el del lote 6, tenía un precio inicial de $6.000.000 y logró subió seis veces su valor de base.

Desde el gobierno provincial aclararon que se les cambiará el dominio a los vehículos para que no terminen asociados a las organizaciones criminales a las que les fueron quitados, una medida que tiene el objetivo de brindar seguridad a las personas que los adquirieron.

En el evento también participaron los ministros de Justicia y Seguridad, Pablo Cococcioni, y de Gobierno e Innovación Pública, Fabián Bastía. Durante su discurso, Pullaro destacó que la subasta "es una política pública, que nunca se debió dejar de llevar a cabo”, en una crítica al gobierno peronista de Omar Perotti que lo antecedió.

En este sentido, el gobernador recordó que se trata de un evento que  “surgió de una ley que tiene la provincia de Santa Fe, la única de Argentina, que apunta a golpear en el corazón de las organizaciones criminales, en lo que más les duele: en los bienes y en el dinero, para quebrar así las posibilidades que tienen de seguir cometiendo delitos”.

Y enfatizó: “Además de meter presos a quienes no nos dejan vivir tranquilos y en paz, sepan que el Estado les va a incautar y rematar los bienes adquiridos, productos de negocios ilícitos, y con esa plata vamos a resarcir a las víctimas y donar a instituciones de bien público para contener a los sectores más vulnerables de la sociedad”.

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El anterior dueño de una moto apareció con su llave e intentó hacer “negocios”

Entre las motos ofertadas, se subastó una Kawasaki ER (Ninja) del 2014 de color negra que arrancaba en un precio base de $3.5000.000. También, una Honda XR150, modelo que llegó a la fama de la mano de la película Terminator 2.

Sin embargo, la que llamó la atención fue una Honda CBR 600 modelo 2003 con un precio base de $5.000.000, pintada de azul, blanco y rojo, que tenía una curiosa observación: “No posee llaves”. El detalle aparecía en el catálogo repartido a los potenciales compradores.

Pero no era porque su tecnología permitía encenderla de otra manera, sino porque las mismas estaban en poder de un hombre que se acercó al Salón Metropolitano, presentándose como el dueño de la moto, y expresó que estaba dispuesto a vendérsela a quien quisiera comprarla.

Según relata Rosario 3, ante la sospechosa e inédita situación, las autoridades del lugar se acercaron al hombre, identificado como Hernán Carlos R, y lo retuvieron. Durante el interrogatorio, el supuesto dueño anterior de la moto mostró la llave original que estaba desaparecida y dijo que su intención era “hacer negocios”.

Finalmente, la llave terminó secuestrada y el hombre quedó a disposición de la fiscalía y demorado en la comisaría novena del barrio de Arroyito. 

RV/LT