El presidente Javier Milei todavía pretende finalmente desechar del peso argentino después de devaluar bruscamente la moneda como parte de una ronda inicial de terapia de shock, según su ministro de Economía.
“El objetivo sigue siendo el mismo: llegar a una dolarización”, dijo Luis Caputo a LN+ en su segunda entrevista consecutiva en horario nocturno.
Caputo, quien el martes por la noche anunció que el nuevo Gobierno recortaría el valor del peso en más de la mitad, declinó referirse a plazos para abandonar la moneda por completo, pero admitió que no es un objetivo a corto plazo.
“La dolarización y el cierre del banco central siguen siendo banderas de este Gobierno”, dijo Caputo.
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Haciéndose eco de comentarios que hicieron funcionarios del banco central más temprano ese mismo día, el ministro de Economía dijo que la agresiva devaluación monetaria de esta semana apuntaba a comenzar a reanclar las expectativas de inflación. Los aumentos anuales de los precios al consumidor superaron el 160% incluso antes de la primera ola de medidas de Milei, que también incluyó agresivos recortes de gastos, en medio de expectativas de que los problemas se agudizarán en el corto plazo.
La inflación mensual alcanzó casi un 13% en noviembre, según datos publicados el miércoles por el Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec).
Devaluación del peso
En lugar de devaluar gradualmente la moneda, el nuevo Gobierno optó por hacerlo bruscamente para que el tipo de cambio oficial se acercara a los observados en los mercados paralelos, dijo Caputo. El objetivo es “contener esa inflación reprimida” y las expectativas, y evitar que las alzas mensuales de los precios superen el 20%, añadió.
El tipo de cambio paralelo, conocido como contado con liquidación, que refleja lo que los argentinos pueden conseguir con su dinero en el mercado negro, se ubicaba en unos 1.040 pesos por dólar el jueves. Después del recorte inicial, que llevó la tasa oficial desde cerca de 365 pesos a 800 pesos, Caputo reiteró que esta tasa se reducirá en un 2% cada mes en adelante.
