Los dos principales funcionarios de la Unión Europea instaron a los líderes del Grupo de los 20 a mantener el orden multilateral en su reunión de esta semana en Buenos Aires, lo que refleja la persistente preocupación por la postura proteccionista del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, sobre el comercio.
"Ninguna región puede hacerlo sola", dijo Jean-Claude Juncker, jefe de la Comisión Europea, en una conferencia de prensa televisada el viernes en la capital argentina. A su lado estaba el presidente de la UE, Donald Tusk, quien dijo: "Dado que este es un momento difícil para la cooperación internacional, me gustaría hacer un llamado a los líderes para que aprovechen esta cumbre –incluyendo sus intercambios bilaterales e informales– para discutir seriamente temas reales como las guerras comerciales".
Una investigación de la administración Trump sobre si las importaciones estadounidenses de autos y autopartes representan una amenaza a la seguridad nacional tiene el potencial de intensificar las tensiones comerciales globales que fueron desencadenadas por los aranceles punitivos de EE.UU. sobre el acero y el aluminio de todo el mundo y sobre una amplia gama de productos chinos.
Los socios comerciales de EE.UU., entre ellos la UE y China, han tomado represalias con sus propios gravámenes sobre los productos estadounidenses, lo que aumenta el riesgo de una escalada económicamente nociva. La investigación sobre el sector automotor de EE.UU., que debería concluir dentro de tres meses, podría dar lugar a más impuestos de importación estadounidenses, más represalias contra EE.UU. y una mayor cantidad de quejas ante la Organización Mundial del Comercio.
Para Europa, los impuestos estadounidenses sobre los automóviles extranjeros también desbaratarían una campaña paralela de la UE y EE.UU. hacia un acuerdo de apertura del mercado. Ambas partes están tratando de promulgar un acuerdo del 25 de julio entre Trump y Juncker en la Casa Blanca que suspendería la amenaza de aranceles de EE.UU. a los automóviles de la UE.
Juncker trató de dar una nota positiva en Buenos Aires señalando que, hasta ahora, Trump no ha apretado el gatillo e insinuó que ambos volverían a comprometerse con el acuerdo de julio en la reunión del G-20. Ambos hablaron en París el 11 de noviembre durante los actos conmemorativos del centenario del armisticio de la Primera Guerra Mundial.
"He notado, no con alegría, pero con cierto grado de satisfacción, que nada ha cambiado entre EE.UU. y la Unión Europea desde nuestra última reunión a finales de julio en Washington", dijo Juncker el viernes. "Encontraremos en el transcurso del día de hoy y dentro del marco de la cumbre una oportunidad para confirmar este compromiso mutuo que hemos pactado en julio".
