Las solicitudes de seguro por desempleo en Estados Unidos cayeron por segunda semana, lo que sugiere que los empleadores se aferran a los trabajadores a pesar de la creciente incertidumbre económica.
Las solicitudes iniciales de beneficios por desempleo disminuyeron en 2.000 a 243.000 en la semana que finalizó el 20 de agosto, según datos del Departamento del Trabajo publicados el jueves. La estimación media de economistas encuestados por Bloomberg apuntaba a 252.000 solicitudes.
Las solicitudes continuas de beneficios estatales cayeron a 1,42 millones en la semana que finalizó el 13 de agosto.
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La caída en las solicitudes de beneficios apunta a una demanda laboral aún sólida a medida que las empresas intentan atraer y retener empleados en medio de una persistente escasez de trabajadores. Aun así, algunos empleadores, particularmente los del sector tecnológico, han estado despidiendo personal o puesto en pausa las contrataciones, lo que podría continuar en los próximos meses mientras la Reserva Federal eleva las tasas de interés para frenar la demanda y controlar la inflación.
Sobre una base no ajustada, las solicitudes iniciales se redujeron a alrededor de 184.000 la semana pasada. El promedio móvil de cuatro semanas subió levemente a 247.000.
