Buena parte de los lectores sabatinos de PERFIL habrán recibido con sorpresa –y tal vez desagrado– la edición de ayer, al no ver reflejados con mayor amplitud el desarrollo y culminación de la multitudinaria manifestación realizada en la Plaza de Mayo para reclamar la aparición con vida de Santiago Maldonado, de cuya desaparición –forzada, según la carátula de la investigación judicial– se cumplió un mes el viernes 1°.
El cierre de la edición –como las de casi todas, tanto de sábado como de domingo, operada a las 21.30– fue la razón por la cual no se llegó a informar con justicia sobre los incidentes registrados en la plaza y sus alrededores cuando la gran mayoría de los manifestantes ya se había retirado. Para una parte de los lectores, hubo una breve e incompleta referencia en la página 6, y para una pequeña porción –que excluyó a los seguidores de PERFIL en provincias y parte del área metropolitana– algo más amplio en la página 6.
Este ombudsman ya se ha ocupado de los riesgos que implica el cierre del diario cuando aún se están desarrollando acontecimientos de importancia.
En los viejos tiempos –cuando los portales de noticias no existían– el problema no tenía solución. Hoy, afortunadamente, los lectores cuentan con la versión online, Perfil.com, que permite actualizar en tiempo real lo que está sucediendo en la Argentina y el resto del mundo. No es lo mismo, claro: los lectores del formato papel pensarán que son víctimas de un sistema operativo superado por las circunstancias.
En la edición de hoy, el tratamiento es otro: se recupera, analiza, actualiza e interpreta lo ocurrido en la Plaza de Mayo y sus aledaños, tanto en lo que hace al contenido y objetivo central de la movilización –en definitiva, que se sepa qué pasó con Maldonado y cuál fue el rol de las fuerzas federales (y de su conducción política) que intervinieron en los sucesos del Sur.
Cafiero. La periodista y escritora Silvia Mercado –una de las profesionales de este oficio con mayor conocimiento de los avatares del peronismo– envió un mail al fundador de PERFIL y editorialista Jorge Fontevecchia, que se reproduce en la página anterior con algunas correcciones estilísticas no centrales. Mercado indica allí que la columna de contratapa del sábado 26 contiene un error histórico al decir que el justicialismo estuvo cohesionado en 1985, cuando en verdad hubo un quiebre interno importante al romper Antonio Cafiero con la conducción del partido.
Fontevecchia fue breve al responder, aceptando el comentario como válido: “Sí, debería haber colocado 1989 en lugar de 1985. Gracias por ser lectora tan atenta”.
Columnista opositor. En algunas ocasiones y por razones puntuales, este ombudsman ha expresado que está fuera de su campo de acción lo editado por otras publicaciones de Perfil y también en el portal Perfil.com, salvo casos en los que éste reproduce textos del diario papel.
Esta es una de las excepciones. Días atrás, la edición online publicó una columna firmada por Gregorio A. Caro Figueroa con el título “¿Es correcto afirmar que Urtubey ganó?”. En la bajada, se afirmaba que “a pesar de que se muestra como alternativa del justicialismo para las presidenciales de 2019, obtuvo el segundo peor resultado del peronismo desde 1946” (http://www.perfil.com/columnistas/es-correcto-afirmar-que-urtubey-gano.phtml).
¿Cuál es la falla en este caso? En realidad, son dos: por una parte, no aclarar –como sería óptimo– quién es el autor, porque sólo indicar su nombre al pie de la nota no parece suficiente tratándose de un texto tan asertivo; por otra, no indicar que quien escribe es un opositor al gobierno provincial.
Para información de los lectores: Gregorio Caro Figueroa es periodista, historiador y político encuadrado en la Unión Cívica Radical, uno de los partidos que se oponen al justicialismo salteño, del cual es principal
referente el gobernador Juan Manuel Urtubey. A los 30 años fue secretario privado del gobernador Miguel Ragone (destituido en 1974 por María Estela Martínez de Perón, que intervino la provincia, y secuestrado poco antes del golpe del 24 de marzo de 1976; es el único gobernador desaparecido de la historia argentina). Caro Figueroa se exilió durante la dictadura, fue asesor en ambas cámaras del Congreso Nacional y acaba de participar en las PASO por una agrupación del radicalismo como precandidato a senador provincial.
Este ombudsman sugiere a la conducción de Perfil.com que –tal como lo hace la versión papel de este diario– las firmas de sus columnistas contengan aclaraciones acerca de su identidad y eventual pertenencia política, institucional, económica o social.