Ya sea en las cercanas Villa Allende y Unquillo, como en el valle de Punilla, Córdoba cuenta con una serie de castillos y palacios que encierran historias y hablan de una época ilustre y aristocrática. Para descubrirlos solo hace falta subirse al auto y en un fin de semana acceder a estas maravillas arquitectónicas.
El Castillo de Fábrega.
Está ubicado en Valle Hermoso, 65 km al noroeste de Córdoba capital. Caminar entre sus muros, torres y grandes ventanales equivale a participar de una experiencia fantástica, con fuertes ecos medievales.
Fue construido en 1870 y actualmente lleva el nombre de El Castillo Hotel Fábrega Organizational Center. La denominación remite a otro de sus distintivos, que es poder disfrutar de un resort de 5* entre las sierras.
El complejo ofrece las comodidades características de la modernidad amalgamadas con el aura gótica que ostenta su edificación. Tales ventajas fueron añadidas durante su más reciente remodelación.
Cuenta con 45 habitaciones, además de salones, livings, bares, restaurantes, spa, gimnasio, biblioteca, bowling y un parque arbolado, entre otros espacios que fueron adaptados para sus nuevos huéspedes.
Es posible hospedarse en el complejo a $28.400 por noche por adulto y $15.900 por cada menor. En la tarifa se incluye el plan gastronómico, que abarca desayunos y meriendas serranas, almuerzos y cenas de tres pasos con menú fijo, agua mineral de vertiente propia, gaseosa, cafetería y bebidas sin alcohol.
El Castillo San Possidonio.
Este se encuentra en Villa Allende, 23 km al norte de Córdoba ciudad y fue construido en la década de 1930 por el arquitecto Augusto Ferrari, quien lo bautizó así en homenaje a su pueblo natal, en Italia.
Tiene cinco niveles desde los sótanos hasta la torre. Sus muros lindan con un arroyo en el que Ferrari perdía la vista en búsqueda de inspiración, según cuentan en el pueblo. Lo hacía sentado en lo más alto de la fortaleza.
Recientemente San Possidonio reabrió sus puertas como sede del primer ‘Croque Madame’ (cadena de cafeterías) del interior del país. El distintivo de esta cadena es que sus locales están instalados en espacios de valor histórico.
La tienda propone infusiones a elección y dos medialunas por $420. También sugiere un té completo para dos personas que incluye dos jugos de naranja, tostadas con manteca y dulce casero, escones, budines, masas finas y una porción de torta a elección por $2.400.
Otra opción es almorzar o cenar en el castillo. Las hamburguesas, por ejemplo, cuestan $720; los spaguetti a la carbonara $840, y el salmón en croute (corteza) con flan de echalotes (bulbos comestibles), $1.450.
El Castillo Monserrat.
Está ubicado en Unquillo, 30 km al noroeste de la capital provincial. Ideado por el empresario Miguel Monserrat, constituye una réplica de los palacios moros de España. Su edificación fue finalizada en torno a 1920.
Sobre su extensión se visualizan piletas, fuentes y una caballeriza adaptada como espacio de muestras. Sobresale su sala principal, ornamentada con azulejos, inscripciones y vitrales. Un vistoso aljibe gobierna este escenario único.
Su propietario, Carlos Merino, adquirió el castillo en 2000 y luego llevó adelante tareas de restauración. Hoy es una casa de familia, aunque ocasionalmente se permite la realización de eventos privados en el lugar.
El Castillo de Wilkins.
El cantante puertorriqueño adquirió este castillo que lleva su nombre a fines de la década de 1990. Se encuentra en Tanti, a 56 km de la Ciudad de Córdoba.
Se trata del único edificio hecho totalmente en piedra de toda Córdoba. Sus torres fueron cinceladas a mano por 50 picapedreros. En su entrada se divisa una roca con una espada clavada que potencia el carácter medieval del lugar.
Otro de sus atractivos es el paisaje que se observa desde su torre central. La altura de la construcción permite ver el pantano que rodea el castillo, un arroyo, el jardín, las sierras y hasta una arboleda centenaria de especies variopintas.
El Castillo de Wilkins permanece abierto al público en las temporadas de invierno y verano, así como durante los fines de semana festivos. La estancia también tiene una pintoresca sala de té donde se presentan muestras de vestuarios y pertenencias del famoso intérprete de ‘Sopa de caracol’.
El Castillo de Mandl.
Ubicado en La Cumbre, a 84 km de Córdoba capital, fue construido en 1920. Poco más tarde pasó a manos del aristócrata austríaco Fritz Mandl, quien escapaba del contexto de incertidumbre que azotaba a Europa.
Mandl puso en marcha una remodelación de tinte minimalista, alejándose del estilo original del lugar, caracterizado por sus rasgos de fortaleza. Tras su muerte, el edificio permaneció cerrado por varias décadas.
Actualmente el castillo funciona como alojamiento y cuenta con opciones gastronómicas y diferentes propuestas de actividades al aire libre. La estadía para dos personas con desayuno incluido en Mandl cuesta $16.000 por noche para las habitaciones junior, $18.500 para las senior y $21.000 para las premium.