Escándalo en bomberos: cómo era la banda que habilitaba comercios y quiénes la comandaban
Creen que la información sobre la causa que está circulando es la punta de un iceberg. Las ramificaciones podrán alcanzar a funcionarios municipales. El combo era completo. Félix Rafael Calama, un hombre de confianza del gremio de la construcción, sería uno de los cabecillas de esta asociación que falsificaba certificados.
Muchos dueños de los negocios están buscando saber si están en regla o fueron estafados sin saberlo. Aún no se puede estimar la cantidad de habilitaciones ni los montos. Algunos se animan a asegurar que rondan en más de 100 los certificados otorgados. En caso de ser una cifra cercana a la realidad, se cree que estos permisos truchos que se “agilizaban” tenían un costo que hoy rondaría entre los $100.000 a $500.000, dependiendo el lugar y las urgencias.
La investigación que destapó un bombero que observó que muchos certificados contaban con su firma o aprobación y que él no había tenido participación obligó al fiscal Guillermo González a tomar una decisión drástica: darlo a conocer, aún con una incipiente investigación.
Quizás se trate de una decisión apresurada del magistrado, pero su intención fue cortar todo de raíz. “Que pasa si hay una tragedia ¿quién se hace responsable?” alertaron desde tribunales avalando que todo tomara estado público. Desde la Jefatura, aún hay silencio de radio. Los dolores de cabeza para la Jefa de Policía parece que no le dan ni una semana de respiro.
Esta banda de bomberos armó un verdadero emprendimiento. Las estafas tenían como protagonistas al menos a siete hombres que ofrecían certificados truchos de habilitación de bomberos y hasta municipales, estaba comandado, al menos en parte, por un vocero de la seccional Córdoba de la Unión Obrera de la Construcción Argentina (Uocra).
Uno de los detenidos es el ingeniero en Higiene y Seguridad, Félix Rafael Calama (56), es un referente ante los siniestros en el ámbito de la construcción. Desde el sindicato, intentando desligarse, explicaron que se trata de un asesor externo y no que no existe un “vínculo directo” con el gremio.
Muy conocido en el ambiente de los periodistas y cronistas de los medios cordobeses, porque siempre se presentaba cuando se conocía la noticia de un accidente reclamando “mayores medidas de seguridad para los trabajadores”.
La banda de los certificados truchos
La lista que completa a Calama, son bomberos, exbomberos y especialistas en higiene o seguridad. Según la investigación, se suman el ingeniero en Higiene y Seguridad Mario García (48); el policía Gorosito; los exbomberos Julio Zarate (55) y Eduardo Arturo Rivero (58); el bombero en funciones Marcos Fernando Luquez, y el técnico en Gestión Ambiental Roque Javier Olmedo (48).
“Se practicaron 14 allanamientos y se detuvo a 7 personas. Estas personas integran una organización que se encargan de gestionar o proveer estos certificados o habilitaciones de bomberos, que es requisito fundamental para lograr la habilitación municipal”, relató Pablo Bazán, ayudante del fiscal de Delitos Económicos.
En la causa, consta que se allanaron concesionarios, supermercados, distintos rubros, en una investigación que está en pleno desarrollo.
La punta del Iceberg
Estas habilitaciones truchas alcanzarían a las que otorga la Municipalidad de Córdoba. Los comerciantes tampoco pueden escapar a las responsabilidades. Estos certificados, los consiguieron sabiendo que hacían algo ilegal o fueron estafados por esta asociación. “Cómo podemos distinguir si tenemos los papeles originales o reales o son truchos. Yo delego todo a una empresa de seguridad e higiene”, comentó uno de los dueños que está mencionado en la causa, pero que aún no fue notificado oficialmente por el fiscal.
Es un gran dilema, tanto para los dueños de los comercios como para las empresas de seguro. Cómo demuestran o confirman que la documentación que cuentan es la correcta.
Pablo Bazán, ayudante del fiscal de Delitos Económicos, no descartó que las detenciones pueden alcanzar a los mismos comerciantes.
En el colegio de Ingenieros Especialistas sonaron todas las alertas, el propio vicepresidente Luis Calderón, no minimizó el hecho y lo calificó como “lo que estamos viendo es la punta del iceberg y saldrá más información en la medida que aparezcan otros involucrados”.
