La velocidad y facilidad que presenta el coronavirus en su variante Ómicron es tal que la distancia no parece ser una barrera. Al menos así lo demuestra lo que podría denominarse como una ola de contagios en la Antártida Argentina, donde debieron evacuar a una importante cantidad de integrantes de la Base Esperanza.
En el comunicado, desde el Comando Conjunto Antártico indicaron que en los últimos días se hizo un relevo del personal militar y científico "por diferentes casos de coronavirus". Ante ese escenario, informaron que "el personal más antiguo fue trasladado a la Ciudad de Buenos Aires y ya se encuentra aislado en instalaciones sanitarias militares cursando sin gravedad la enfermedad".
La variante Ómicron llegó a la Antártida e infectó a científicos ya vacunados
Si bien de manera oficial no dieron precisiones, serían 24 las personas que debieron ser trasladadas del continente antártico hacia el territorio por el brote de contagios. "Todos se encuentran vacunados y cuentan con la aptitud física requerida para ser parte integrante de ésta y cada una de las bases pertenecientes a la República Argentina".
El operativo especial de traslado se llevó a cabo el fin de semana pasado bajo un estricto cuidado y bajo condiciones climáticas adversas, principalmente a raíz de la baja visibilidad.
Los contagios de coronavirus llegaron en un momento clave de la actividad antártica debido a que el miércoles pasado se inició de manera oficial la Campaña Antártica de Verano 2021/2022. Se trata de un proceso de recambio de personal a partir de la llegada a la Base del rompehielos ARA "Almirante Irizar", que también cumple "con el reabastecimiento de víveres, materiales y personal, sumándose además el repliegue de residuos históricos".
El aislamiento preventivo de los contagiados en la Antártida
A modo de contexto, vale mencionar que antes de la partida del rompehielos a territorio antártico hubo un periodo de aislamiento estricto con el objetivo de no llevar el coronavirus a la Antártida. Al menos así lo informó a Télam días atrás el comandante del Irizar, capitán de navío Carlos Musso Soler.
Ese periodo, según la información, se inició el 28 de diciembre pasado mientras el buque estaba anclado en el Puerto de Buenos Aires. "El buque tiene una capacidad de 313 camas y estamos en un nivel de ocupación cercano al 90 por ciento porque vamos a zarpar el 11 de enero con 296 personas a bordo, eso implica que además vamos a tener que organizar distintos horarios de comida", había manifestado el comandante.
Al respecto, el 12 de enero pasado, en el acto de inicio de la nueva campaña antártica, estuvieron en el lugar los ministros de Defensa, Jorge Taiana; de Ciencia y Tecnología, Daniel Filmus; y el secretario de Malvinas, Guillermo Carmona. El listado también lo completan los funcionarios militares como estuvieron presentes los jefes del Estado Mayor Conjunto de las Fuerzas Armadas, de la Armada, de la Fuerza Aérea y del Comando Conjunto Antártico.
Este medio intentó comunicarse con autoridades de las Fuerzas Armadas y del gobierno nacional acerca de la situación sanitaria en la Antártida. Sin embargo, al cierre de esta nota no hubo respuestas.
Si bien ya hubo contagios en la Antártida, los casos se habían detectado en bases de otros países con presencia en el continente helado.
AS cp
