De acuerdo con los datos del Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC) una familia de cuatro personas necesitó en noviembre un ingreso de alrededor de $146.000 para no caer bajo la línea de la pobreza.
Esto demuestra que la inflación ha destruido con vehemencia el poder adquisitivo de las familias, por lo que cada vez más personas tienen dificultades para acceder a la alimentación básica..
A pesar de que en el primer semestre los datos del INDEC mostraron una baja en la pobreza hasta el 36,5% de la población, es decir, 10,6 millones de personas, la indigencia subió a 8,8% (2,6 millones de personas); hay datos que coinciden en que para el segundo trimestre del 2022 se asistió a un nuevo incremento de la tasa de pobreza.
Cada día 2.800 argentinos caen en la pobreza y suman medio millón en este primer semestre 2022
Según un relevamiento del Centro de Investigación y Formación de la República Argentina (CIFRA-CTA) la incidencia de la pobreza fue de 38,5% en dicho trimestre, lo que implica que para entonces 17,8 millones de personas ya eran pobres. Mientras que la indigencia dio 9,4%, equivalente a 4,3 millones de personas.
De acuerdo a CIFRA-CTA, si se comparan la pobreza y la indigencia de este segundo trimestre con el primero, “puede decirse que casi 2 millones más de personas cayeron en situación de pobreza y 500.000 personas en la indigencia”.
Desde la perspectiva del Nowcast de Pobreza de la Universidad Torcuato Di Tella, la estimación de la tasa de pobreza es de 39,9% para el semestre que va de junio a noviembre del 2022 con un intervalo del 95% de confianza, el número rondará entre el 28,3% y el 41,5%.
Así, el segundo semestre terminaría con 28,9 millones de personas que, según la proyección, equivale a que el 40% de las personas viven en hogares urbanos pobres.
Los factores que inciden en la aceleración de la pobreza
“La inflación, particularmente de los alimentos, golpea muy fuerte. Esto hace que cualquier ingreso, incluso los que otorga el Estado, se vayan deteriorando. Nosotros relevamos cómo las asignaciones, el Potenciar y las Tarjetas Alimentar han perdido contra los precios de la Canasta Básica”, señaló Silvia Saravia, referente nacional de Libres del Sur, en diálogo con PERFIL.
El dato que más preocupa: la pobreza infantil es superior al 50%
El documento de CIFRA-CTA coincide con Saravia en ese aspecto y sostiene: “Este incremento es resultado directo de la aceleración de precios que erosionó los ingresos familiares, y ocurrió incluso a pesar de la implementación de políticas como el subsidio extraordinario a jubilados y el llamado refuerzo de ingresos, que apuntaron a contener parcialmente esta situación.”
¿En qué rango etario creció más la pobreza?
De acuerdo a los datos que dio a conocer el INDEC del primer semestre, la pobreza infantil afectó a 50,9%, es decir a 5,54 millones de niños menores de 14 años, de los cuales 1,38 millones son indigentes.
“Nosotros lo que percibimos es que hay dos franjas etarias que han sido mayormente golpeadas por la pobreza. Una es la de los niños, niñas y adolescentes. Vemos que hay muchas familias con muchos menores a su cargo que se vieron muy, pero muy afectados este año por la pobreza”, señaló Saravia.
“La otra son los jubilados que percibieron cómo sus ingresos se vieron perjudicados por la inflación de los alimentos, pero también de los medicamentos que ha sido por encima del 100%”, agregó.
Pobres con trabajo: la amenaza que acecha a la clase media argentina
“Lo que vimos en el 2022 es que la pobreza está levemente por encima del nivel del 2021, un 43,2%. El dato más importante para mí no es la cifra exacta, sino que si uno analiza los datos de los últimos cuatro años de la Encuesta de la Deuda Social (2019-2022) estamos en un nivel de pobreza por ingresos de alrededor del 40%. Hace cuatro años que se está en el nivel más alto de toda la serie que medimos. Ese es el dato más relevante”, señaló Santiago Poy, investigador del Observatorio de la Deuda Social de la UCA y el CONICET, en diálogo con PERFIL.
Los pobres con trabajo
El 17,7% de los trabajadores formales se encuentra por debajo de la línea de la pobreza debido a la aceleración de la inflación. Ese dato surge del estudio de CIFRA-CTA, que analiza la incidencia de la pobreza sobre los empleados con base en la Encuesta Permanente de Hogares (EPH) del INDEC.
La existencia de “trabajadores pobres” ha crecido en los últimos años, al tiempo que se expandió la pobreza, y exhibe con crudeza el grado de deterioro que sufrieron los ingresos.
“La situación de los pobres con trabajo es uno de los logros, entre comillas, de este Gobierno que, ha hecho algo que no se hizo ni siquiera durante el menemismo con los trabajadores: que los salarios hayan perdido tanta capacidad de compra y que hayan dejado de ser competitivos con los de otros países de la región”, señaló al respecto Saravia.
Por qué el empleo privado crece en cantidad pero no en calidad
“Hoy cuando se compara el salario en dólares ha bajado muchísimo. Eso fue siempre un pedido de los empresarios internacionales hacia los Gobiernos y hoy con la aplicación del plan del FMI en el país, se hizo posible”, lamentó.
No obstante, la posibilidad de tener ingresos que superen la línea de pobreza no es igual para todos los trabajadores. Quienes más se ven afectadas son las personas en relación de dependencia sin un contrato registrado; así como las y los trabajadores por cuenta propia (TCP) que no son profesionales.
“En el primer caso, la pobreza alcanzó el 40,8% y en el segundo, el 37,1%. El bajo nivel de ingresos implica que la incidencia de la pobreza sea significativa incluso para los asalariados registrados, los empleadores y los trabajadores independientes profesionales”, agrega el documento de CIFRA-CTA.
¿La pobreza es coyuntural y no estructural?
“Hay dos elementos. Hay uno coyuntural y uno estructural. El estructural es que si uno mira los datos de pobreza de Argentina en los últimos 12 años siempre tuvimos niveles de pobreza que nunca están por debajo del 25% en los mejores años. Ese es un componente estructural que la Argentina no ha logrado resolver”, advirtió Poy.
“Después en los últimos cuatro, cinco años, hay un elemento más de coyuntura que tiene que ver con que se ha consolidado un régimen de alta inflación que afectó fuertemente el salario y ese elemento derivó que en un sector de la población que no era pobre pase a estar en la pobreza, el reverso de eso, es que si hay alguna mejora en la inflación o el poder adquisitivo vas a tener la posibilidad de bajar la pobreza; ya que esos sectores que tienen empleo e incluso empleo formal, van a poder salir de esa situación”, agregó el investigador del CONICET.
¿Las políticas públicas no han tenido la capacidad de distribuir la riqueza?
"Acá también hay dos componentes. Por un lado, hay políticas públicas muy orientadas a sostener y bajar la indigencia y garantizar el acceso a los alimentos como la Tarjeta Alimentar, los bonos, los refuerzos de ingresos a la población más vulnerable. Eso tiene un efecto grande en mantener la indigencia por debajo de los dos dígitos y eso se ha logrado con políticas focalizadas hacia eso”, contestó Poy.
Hay casi 2 millones de trabajadores en blanco que tienen ingresos por debajo de la pobreza
“Ahora, en un sentido más global, lo que tiene que ver con la distribución del ingreso en un sentido funcional, es decir, lo que se llevan los asalariados o no asalariados, claramente el saldo en los últimos años es muy negativo. Hemos pasado de una participación del salario de casi el 50% en el valor agregado en los años 2010, 2013, al nivel de hoy que está en torno al 40%", explicó.
Y agregó: "Esa pérdida te habla de una redistribución regresiva del ingreso así que desde ese punto de vista sí considero que hacen falta políticas más proactivas para la mejora del salario”, aseveró.
¿Qué esperar de la pobreza en el 2023
“Con las condiciones que nos impone el FMI, con los vencimientos de deuda, la situación internacional que impulsa los precios de las materias primas, nos parece que va a continuar el deterioro de la situación económica”, lamentó Saravia.
“No vemos una perspectiva de mejora, la única cuestión que puede llegar a aliviar un poco la situación es que, al ser un año electoral, el Gobierno incremente la ayuda social, es lo único que podría aparecer como un paliativo, pero en términos generales creemos que va a ser un año difícil porque la economía se está enfriando. La inflación cede, pero a costa de que haya un bajo consumo”, agregó la referente de Libres del Sur.
Hoy en día, más de la mitad de la población en la Argentina tiene problemas a nivel empleo, trabaja en situaciones de precariedad y de baja productividad. Asimismo al derecho a la ropa que, junto con el derecho a la alimentación y a la vivienda, son parte del derecho universal a un nivel de vida adecuado y expone los peores síntomas de una economía en decadencia que no ha creado inversión y capacidad para producir riqueza.
LR