El Gobierno, a través de las secretarías de Finanzas y Hacienda, autorizó la emisión de nuevos instrumentos de deuda pública, además de la extensión de elementos ya existentes por un monto total que supera los 32 billones de pesos y 3.500 millones de dólares.
El mercado espera señales del Gobierno: ¿Como cubrirá los vencimientos de enero de 2026?
La normativa fue publicada en el Boletín Oficial del lunes 15 de diciembre, en la Resolución Conjunta 63/2025, bajo las firmas del secretario de Finanzas, Alejandro Daniel Lew y el secretario de Hacienda de la Nación, Carlos Jorge Guberman.
Cuáles son las nuevas herramientas que habilita la norma 63/2025
Con esta nueva medida, el Gobierno habilitó la colocación de cinco nuevos instrumentos en la licitación realizada la semana pasada, el jueves 11 de diciembre:
- Una Letra del Tesoro Nacional Capitalizable en pesos con vencimiento el 17 de abril de 2026 por hasta 8 billones de pesos de valor nominal original.
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- Dos letras capitalizables adicionales con vencimientos en noviembre de 2026 y mayo de 2027 por hasta 5 billones de pesos cada una.
- Dos instrumentos con ajuste por el Coeficiente de Estabilización de Referencia (CER) por montos equivalentes.
Elementos que se amplían
Además de la creación de estas nuevas herramientas que fueron anunciadas, en la misma Resolución se comunicó la autorización para la ampliación de emisiones previas:
- La Letra Capitalizable con vencimiento en mayo de 2026 se amplía hasta 4,3 billones de pesos.
- La Letra con ajuste CER al mismo vencimiento alcanza los 5 billones de pesos.
- La Letra a tasa TAMAR con vencimiento en agosto de 2026 se amplía a 4,8 billones de pesos.
- La Letra vinculada al dólar estadounidense con vencimiento en abril de 2026 se incrementa hasta 3.555 millones de dólares.

Programa de financiamiento del Tesoro
Según se indicó en los considerandos de la Resolución 63/2025, las emisiones se realizan en el marco del programa de financiamiento del Tesoro Nacional, contando con las autorizaciones presupuestarias correspondientes para el ejercicio del corriente año.
Los instrumentos ofrecen distintos perfiles de rendimiento según su indexación, incluyendo tasas capitalizables determinadas por licitación, ajuste por inflación (CER) y cobertura cambiaria.
Buscando cubrir los vencimientos de enero del 2026
El Tesoro volvió a salir al mercado la semana pasada con un bono en dólares -el Bonar 2029N-, con vencimiento en 2029, por 1000 millones de dólares a una tasa del 9,26%, en una operación que fue leída como una señal de reapertura gradual del financiamiento en moneda dura, aunque con interrogantes aún abiertos.
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“La señal que deja la operación es que una parte sustancial de la demanda habría sido inducida por recientes modificaciones regulatorias aplicables a compañías de seguros y reaseguradoras, entre otras, que elevaron el atractivo relativo del instrumento”, explicó Gustavo Araujo, Head of Research de Criteria.
El analista advirtió que “el punto pendiente ahora es saber cómo planea el Gobierno obtener los más de USD 3.000 millones restantes necesarios para cubrir los vencimientos de deuda de enero”, aunque destacó que la transacción “constituye un avance relevante hacia la normalización del financiamiento del Tesoro”.
Desde la consultora LCG opinaron que “la tasa de corte fue de 9,26%, levemente inferior a la curva de mercado, pero definitivamente por encima de lo que esperaba el gobierno. El monto de colocación también fue inferior a los montos que venían barajándose”.
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“Fue una buena noticia volver a tantear el terreno de la emisión de deuda en dólares, aunque sea en ámbito local, pero los rendimientos continúan denotando dudas respecto de la capacidad de repago de la deuda en dólares”, señalaron desde la consultora, al mismo tiempo mencionaron que “lo importante es preguntarse cuáles serían las condiciones suficientes para terminar de derribar la percepción de riesgo soberano”.
GZ / lr