El establishment entró en zona de incertidumbre. Las inversiones y el empleo quedaron congelados a la espera de una definición que tardará en llegar, y que tampoco tendrá resolución el 10 de diciembre, cuando asuma el sucesor presidencial. Por lo menos, así reaccionó el mundo de las empresas más poderosas del país, tanto de capital nacional, como las extranjeras, ante el efecto libertario. Desde “impracticable”, hasta “impredecible”, se extienden las calificaciones a los planes del candidato Javier Milei, en un sector privado que, sin embargo, comenzó a armar un plan de seducción y de contención.
“El problema del plan es que no tiene plan”, se preocupó el dueño de una empresa financiera, quien, sin embargo, aclaró que un plan de dolarización en la Argentina le permitiría tener un flujo de inversiones que multiplicaría sus negocios. “Levanto las dos manos si me preguntan si acepto el ingreso masivo de dólares, porque me permitiría tener un flujo con capacidad de generar hasta préstamos hipotecarios a 20 años”, se entusiasmó, en una charla privada de la que participó PERFIL a inicios de la semana.
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Esa mirada es unívoca en casi todos los empresarios que este medio consultó. Esa fórmula también quedó plasmada en el Council of the Americas que este jueves concentró las miradas y los atentos oídos de casi dos centenares de dueños y ejecutivos de primera línea del país que se dieron cita en el porteño Alvear Palace Hotel. “Pero es impracticable, porque un plan con la gente afuera te genera un clima de hostilidad social que hace imposible el funcionamiento de los negocios, más allá de que generaría un clima de inestabilidad absoluto. Habría más desempleados, menor consumo y reclamos constantes”, alertó el dueño de una empresa vinculada con la construcción.
El plan para calmar los “desequilibrios” de Milei
El miércoles hubo una cena previa al cónclave empresario. Fue cerrada y estuvieron los dueños de las empresas que sponsorearon el convite del jueves. Fueron invitados los referentes de todos los sectores políticos, pero en realidad los hombres y mujeres de negocios que estaban sentados en la mesa esperaban definiciones sobre el plan de Milei. Hasta ahí fue el economista Darío Epstein, de buen vínculo con el círculo rojo, quien lo respeto por su “idoneidad profesional”.
“¿Es así todo el tiempo o, en realidad, es el personaje que muestra para acaparar la atención del voto bronca?”, le preguntaron a Epstein, por lo bajo. El economista reconoció que Milei tiene una personalidad “particular”, e intentó bajar los decibeles de la revolución por derecha que el libertario profesa en redes sociales y en los medios de comunicación. “Su trabajo es moderar los desequilibrios que tiene Javier (Milei)”, le confesó a este medio uno de los comensales de la noche pre Council.
El tono calmo, los guiños a los empresarios y las pausas que marcó durante su discurso en el Consejo de las Américas pareció haber respondido a ese pedido de moderación, pero encontró un silencio revelador en el público: “No hubo aplausos, porque acá no está el voto genuino de Milei. Pero, también, porque esperábamos el inicio de un plan más moderado y con mayor previsibilidad. Las posibilidades de que sea presidente cada vez son más grandes, y los miedos que tenemos por nuestros negocios también se agigantaron”, admitió un integrante del sector mercantil.
De la risa al espanto; del espanto al temor; y del temor al amor
En una suerte de encuesta que realizó PERFIL con empresarios de distintos sectores productivos del país, creció de manera considerable el replanteo de la votación entre las PASO y las generales de octubre. Algunos, que incluso aportaron dinero y cuadros técnicos para la alternativa de Juntos por el Cambio, hoy comenzaron a admitir que modificarán su elección y acompañarán a Milei en las urnas. Sucede que los planteos del candidato presidencial coinciden con el sueño de comercio y competencia libre que vienen profesando en distintos ámbitos. “Voté a Patricia, pero ahora lo voy a acompañar a Milei. Si logra aplicar la mitad de las reformas que piensa hacer, habrá llegado más lejos que todos los demás”, sostuvo un representante del sector financiero.
La confesión de partes, aunque sea off the record, pareció buscar una amplificación que llegue a los oídos del candidato libertario. Los cálculos preliminares que hace el círculo rojo lo ponen en un eventual ballotage con el ministro de Economía, Sergio Massa, pero con “muy buenas chances de concentrar sus votos y los que dejará Patricia (Bullrich)”. El dueño de una constructora reveló una encuesta que se compartió, vía whatsapp, en el mundo empresario: Milei está cerca de los 40 puntos; Massa crece, aunque de manera más moderada; y Bullrich cae fuertemente, en un margen que oscila entre el 16% y el 19%. “Era nuestra candidata. Pero el fervor de La Libertad Avanza le quitó competitividad”, se lamentó.
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Durante la última semana, la agenda de Milei con empresarios se completó. Los llamados a los asesores del candidato presidencial también crecieron en rating. “El problema es que no tiene demasiados interlocutores para hablar de futuro. Porque si bien es cierto que insistirá con su discurso rupturista, es hora de que, aunque sea por lo bajo, comience a trazarse un plan realista”, reclamó el representante de una de las pocas empresas industriales que estuvo en el Council. Mientras que un empresario energético fue más tajante: “Vaca Muerta es el faro del futuro del país. Pero, Milei no tiene a nadie para interactuar con el sector. Esa es una definición en sí misma”, se lamentó, ante una imagen que logró concentrar más incertidumbre luego de las PASO.
AM / ED
