En otro intento por desafiar al mundo y aumentar la tensión internacional en Asia, Corea del Norte ha realizado un nuevo lanzamiento de un misil no identificado, según ha reportado el ejército surcoreano, país que hace más de medio siglo mantiene una difícil relación con el gobierno del temido y poco predecible Kim Jong Un.
Según se pudo saber hasta el momento, el proyectil podría ser de tipo balístico, y voló en 30 minutos una distancia de 700 kilómetros y cayó en el Mar de Japón.
Este lanzamiento llega en la misma semana en la que Corea del Sur ha elegido a un liberal como presidente. Sus primeras intenciones habían sido leídas por los analistas como un acercamiento a los vecinos del norte pero tras este hecho, ha ordenado una reunión de urgencia del Consejo Nacional de Seguridad.
Aunque en el intento previo de hace unas semanas la prueba resultó ser un fracaso (en los últimos dos meses los norcoreanos han fallado cuatro veces consecutivas en sus tests militares), en los últimos dos meses, Corea del Norte ha realizado cuatro lanzamientos.
Ante esta delicada situación, Japón, quien ha condenado firmemente el hecho y recordado que se trata de una violación de las resoluciones de Naciones Unidas, fue el primero en alzar la voz.