España autorizó ayer al barco humanitario Open Arms, con unos 310 migrantes a bordo rescatados en el mar Mediterráneo, a navegar por sus aguas después de que Italia le cerrara sus puertos y del rechazo de Malta.
Los guardacostas españoles, “debido al rechazo o falta de respuesta de los puertos más cercanos, ha autorizado al buque dirigirse hacia aguas territoriales españolas”, informó el gobierno.
Negativas. Libia, Francia y Túnez no respondieron a las peticiones de la ONG española Proactiva Open Arms para desembarcar a los 311 hombres, mujeres, niños y bebés, después de que el ministro del Interior italiano, Matteo Salvini, cerrara sus puertos al buque, y de la respuesta negativa por parte de Malta.
“Mi respuesta es clara: ¡Los puertos italianos están cerrados!”, tuiteó el ministro de extrema derecha. “Para los traficantes de seres humanos y para los que los ayudan, la fiesta ha terminado”, añadió.
La ONG precisó que entre los migrantes rescatados, una mujer y su bebé de un día, nacido en una playa libia, fueron llevados a Malta por un helicóptero de los guardacostas.
El gobierno de Malta confirmó haber rescatado a un recién nacido y su madre, de 23 años.
Rescate. Proactiva Open Arms anunció el viernes por la noche el rescate de más de 300 migrantes frente a las costas libias, entre ellos mujeres embarazadas, que se encontraban a bordo de tres embarcaciones precarias.
El barco de la ONG había zarpado de Barcelona hace unos días para volver al Mediterráneo Central, gracias a una alianza con otras organizaciones para volver a salvar vidas a pesar de que Salvini reafirmó en varias ocasiones que no dejará desembarcar a los inmigrantes en los puertos de su país.
La portavoz de la ONG, Laura Lanuza, dijo que el Open Arms se dirige ahora a Algeciras, cerca de Gibraltar. El tiempo de travesía dependerá del clima, pero llevará “cinco o seis días”, indicó.
El velero Astral, que pertenece a la ONG, zarpó de Barcelona para encontrarse con el Open Arms y aprovisionarlo de comida, añadió.
La ONG publicó un video en internet de algunos migrantes rescatados “de una muerte segura en el mar”.
“Si el frío se pudiera sentir en la imagen, la emergencia sería más fácil de entender. Sin puerto donde desembarcar, y con la negativa de Malta para darnos comida. No es Navidad”, afirmó.
Después de anunciar el cierre de los puertos italianos, Salvini tuiteó una foto con el plato que comió en el almuerzo.
El fundador de Open Arms, Oscar Camps, tuiteó en respuesta a Salvini: “Tu retórica y tu mensaje, como todo en esta vida, terminará. Pero deberías saber que en unas décadas tus descendientes sentirán vergüenza por lo que haces y dices”.
La inmigración clandestina que parte de las costas de Libia se arriesga a los peligros más letales, con más de 1.300 migrantes fallecidos en su intento por llegar a Italia o Malta desde principios de este año, según la Organización Internacional para las Migraciones de la ONU.