A pocos días de que Human Rights Watch calificara de "hostiles” a algunas reformas judiciales impulsadas por el gobierno de Alberto Fernández, se sumaron las críticas del Departamento de Estado norteamericano, que se declaró en contra del juicio político contra la Corte Suprema y de esta forma agregó un capítulo de tensión a las relaciones diplomáticas entre ambos países. En este marco, un funcionario de Estados Unidos recalcó la necesidad de "respetar las instituciones democráticas y la separación de poderes”.
Antony Blinken conduce el Departamento de Estado de los Estados Unidos y con regularidad recibe informes sobre la situación política, económica e institucional de distintos países de América Latina. En ese sentido, el pedido de juicio político promovido por el oficialismo contra el máximo tribunal no pasó desapercibido y Estados Unidos remarcó su "preocupación" por el presunto avance del Gobierno contra las instituciones democráticas y los mecanismos de división de poderes.
“Estamos al tanto de estos informes. Hacemos un llamado a todos los actores en la Argentina a respetar las instituciones democráticas y la separación de poderes", advirtieron voceros del Departamento de Estado a distintos medios que indagaron su posición al respecto.
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La semana pasada el Gobierno se vio obligado a posponer la fecha acordada para que el Congreso trate la remoción de los miembros del máximo tribunal, por falta de respaldo de algunos sectores políticos.
A las dificultades locales se sumaron los reproches de Human Rights Watch (HRW), una organización no gubernamental dedicada a la investigación, defensa y promoción de los derechos humanos, que en su reciente informe advirtió que “el gobierno de Fernández y sus aliados introdujeron reformas al sistema de justicia que podrían socavar la independencia de los tribunales y los fiscales”.
En sintonía con dichas denuncias, el Departamento de Estado de los Estados Unidos expresó una preocupación idéntica por la iniciativa del Gobierno contra la Justicia.
Deterioro de las relaciones con Estados Unidos
Las relaciones diplomáticas con Estados Unidos "se resintieron" y sumaron un nuevo capítulo de tensión, si bien el gobierno de Alberto Fernández ya había recibido cuestionamientos por su política exterior.
Meses atrás, la reunión bilateral con el presidente de China, Xi Jinping, así como la postura ambivalente del Gobierno hacia los regímenes de Venezuela, Nicaragua y Cuba, motivaron el deterioro de las relaciones con Estados Unidos.
Sin embargo, desde la presentación del juicio político contra la Corte, el vínculo con Estados Unidos experimentó un nuevo retroceso, mientras voceros de la Subsecretaría de Asuntos del Hemisferio Occidental manifestaron a los medios la necesidad de que "todos los protagonistas institucionales de la Argentina respeten a la democracia y a la separación de poderes”.
CA/ED
