Según informó el periodista Alejandro Gomel en Modo Fontevecchia, por Net TV, Radio Perfil (AM 1190) y Radio Amadeus (FM 91.1), la idea desde el sector de Kicillof es enfocarse en la campaña electoral, en la campaña de cercanía, retomar el ritmo y el pulso de esta para seguir con las recorridas, que le dieron buenos resultados en las PASO.
El control de daños que se está haciendo a esta hora marca que Kicillof busca mostrarse como un dirigente alejado de lo que es la figura de Insaurralde y despegarse de esto.
Se evaluó de manera positiva la rapidez de sus reflejos, ya que apenas se conoció la noticia, en menos de cuatro horas se le había pedido la renuncia al ahora ex jefe de Gabinete de la provincia de Buenos Aires.
La caída de Insaurralde golpeó de lleno en el círculo de bingueros
Allí también es donde se hace una distinción en el manejo con la foto de la fiesta de Olivos, ya que se dejó correr mucho tiempo, creyendo que no iba a tener impacto, por lo que recién después de muchos días Alberto Fernández salió a pedir disculpas.
A partir de esto, la expectativa es que no impacte electoralmente, aunque hay mucha preocupación, pero esperan que pasen estos primeros días, ya que aún hay plena efervescencia.
La especulación es que pueda empezar a bajar un poco el escándalo y allí ver qué deja y cuánto daño hizo el escándalo a la candidatura del gobernador de la provincia de Buenos Aires.
Cómo impactó el escándalo de Insaurralde a Massa y a Kicillof en redes sociales
Sin embargo, especulan en que la figura de Kicillof quede a salvo de Martín Insaurralde. A partir de ahora la idea es cerrar el tema Insaurralde, seguir con una campaña propositiva, mostrar lo que se hizo en la Provincia, recorrer cada distrito, cada ciudad y plantear hacia adelante lo que viene.
El interrogante es cuál es la real dimensión electoral que va a tener el escándalo Insaurralde. Pero, cerca de Kicillof, lo que plantean es seguir adelante con la campaña, tratar de pasar la página y enfocarse en recorrer toda la Provincia.
MVB JL