Primera consecuencia de la leve desaceleración de la inflación, que tras el 8,4% de abril cedió algo a 7,8% en mayo: el Banco Central anunció que no modificará la tasa de interés.
Ayer, la autoridad monetaria advirtió que dejará la tasa que se mantiene en el 97 por ciento, con lo que interrumpió la constante suba de la tasa de referencia que había llevado adelante en los últimos meses.
El BCRA basó su decisión no solo por lo ocurrido con el número de mayo sino también en que, en base a sus estimaciones, considera que la desaceleración sigue adelante en el mes actual.
"Los diversos indicadores de alta frecuencia de precios mayoristas y minoristas monitoreados por el BCRA sugieren en lo que va de junio una desaceleración adicional en el ritmo de crecimiento de los precios," señaló el Central en un comunicado.
Inercia inflacionaria, la razón por la cual el país convive con la inflación
La moderación en el índice tiene un efecto ínfimo sobre los bolsillos, en el marco de una inflación que fue del 114% en el último año, entre las más altas del mundo. Pero permite que los depositantes reciban una tasa de interés real positiva, que consiga superar aunque sea en un mínimo margen al efecto de la inflación.
De este modo, la tasa para el plazo fijo minorista a 30 días quedó en 8% y al menos brinda un incentivo para no dolarizar los ahorros o las inversiones, tanto a través de los dólares financieros o del mercado "blue".
JL