Reconocerse líder sin aceptar voces en contra sin dudas tiene sus contraindicaciones. El magnate Elon Musk, dueño y hasta el momento CEO de la red social del pajarito desde su compra en octubre pasado al parecer no admite brillar menos en la constelación del mundo Twitter.
Apenas días pasaron desde la celebración en Arizona de la 57°edición del Superbowl, el show musical de medio tiempo más asombroso que cada año paraliza a Estados Unidos y al mundo. Este año la definición del deporte más popular en USA tuvo como protagonista a la estrella Rihanna, quien al finalizar la presentación anunció su embarazo y todo fue festejo. Lo cierto es que fue mientras transcurría el descomunal show cuando Musk hizo una publicación desde su cuenta que no recibió la repercusión esperada.
Coincidencias letales
Millones de usuarios publican al unísono sus mensajes en Twitter, pero ciertas coincidencias causan una herida mortal. La realidad es que el multimillonario habría estallado en furia incontrolable, al percatarse de que su posteo quedó opacado por un tweet publicado al mismo tiempo por el presidente Joe Biden, mientras se disputaba el encuentro y la gran final del futbol americano.
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Eso habría derivado en que en plena madrugada le exigiera a su equipo de ingenieros que encuentren la forma de potenciar la exposición de sus tweets. La orden de Musk fue contundente al punto que habría pedido que su presencia en la red social sea tal, que incluso los posteos lleguen de forma compulsiva a los usuarios que no son sus seguidores.
La forma de lograrlo fue mediante el ajuste del algoritmo de la red social de modo que sus publicaciones tengan una mayor presencia entre los usuarios de la plataforma, según informaron en las últimas horas los medios locales que siguen minuto a minuto las excentricidades y polémicas decisiones de Musk.
Un pedido de “urgencia” en la madrugada
El portal de noticias, Platformer, detalló que la información tiene sustento en documentación y el testimonio de personas involucradas en el asunto.
Según el medio “a las 2:36 de la mañana del lunes, James Musk, primo del CEO de Twitter, envió un mensaje urgente a los ingenieros de la red social: ‘Estamos depurando un problema con la participación en toda la plataforma”, al etiquetar “@aquí” en Slack se aseguró de que cualquiera en línea lo viera. “Cualquier persona que pueda crear tableros y escribir software puede ayudar a resolver este problema. Esto es de alta urgencia. Si estás dispuesto a ayudar, dale me gusta a esta publicación”, sería el mensaje que fue enviado a los ingenieros.
¿Cuál era la extrema urgencia? Al parecer el motivo de la emergencia quedó expuesto cuando los ingenieros constataron que el tuit de Elon Musk sobre el Super Bowl tuvo menos repercusión que el del presidente Joe Biden.
Por una parte, Biden había twitteado apoyando a su esposa precisamente en su apoyo a los Philadelphia Eagles, mensaje que generó casi 29 millones de reacciones entre sus 37 millones de seguidores. Mientras Musk, quien también publicó dando a conocer su apoyo a los Eagles, solo generó poco más de 9 millones de visualizaciones, entre sus 128 millones de seguidores.
Pocos minutos más tarde de la publicación poco satisfactoria para Musk, fue eliminada. Con total frustración, tras los acontecimientos, el director general de Twitter habría volado a San Francisco en su avión privado para exigir respuestas de su equipo, según refiere el medio local.
La omnipresencia de Musk
Las consecuencias de la orden dada por el millonario se hicieron notar rápidamente: los usuarios de Twitter al abrir la aplicación, al día siguiente del mega show, encontraron que las publicaciones de Musk invadieron repentinamente su time line en la red social.
Lo cierto es que los cerca de 80 ingenieros que aún permanecen en la planta de trabajadores, tuvieron que desarrollar en tiempo récord la reconfiguración del algoritmo de la red social, para de ese modo poder “potenciar artificialmente” por 1.000 la exposición de los tuits del empresario. El efecto del cambio es que sus mensajes ahora tienen prioridad en el “feed” de publicaciones frente al resto de los mensajes.
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De este modo Twitter implementó un código que da “luz verde" en forma automática a todos los tweets de Musk, lo que implica que evadirán los filtros de la red social diseñados para seleccionar y mostrar el mejor contenido posible. Esta herramienta, el código "multiplicador de usuarios avanzados", también permite evitar el control que en caso de estar activo no permitiría que una única cuenta (en este caso la de Musk) invada el feed de la plataforma.
Cabe destacar que la obsesión del dueño de la plataforma, se acentuó en las últimas semanas al punto de haber anunciado el despido de uno de sus ingenieros, después que le alertara sobre la caída en las visitas y el interés general de los usuarios por los mensajes del millonario.
Escandalosa foto que confirmó la orden
Fue el mismo Elon Musk quien en las últimos días publicó una muy polémica imagen con la intención aparente de querer confirmar su orden y deseo de imponerse con sus tweets: la imagen de un “meme” que generó comentarios muy críticos, por la directa referencia a la idea de estar siendo “forzados” los usuarios de la red social a consumir “los tweets de Elon”.
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Horas más tarde, con el revuelo generado entre los usuarios, Musk publicó un mensaje: “Por favor sigan conectados mientras hacemos ajustes al... algoritmo”, tal vez queriendo hacer saber que podría revertirse la medida. Seguramente aún restan más capítulos de esta historia.
AO FM