MODO FONTEVECCHIA
La lucha contra el narcotráfico

Gabriel Chumpitaz: "Estamos viviendo una guerra urbana en Rosario"

El diputado rosarino por el PRO aseguró que el narcotráfico está siendo "acorralado por la presión del Gobierno". "Esto es una lucha de supervivencia para la República Argentina", señaló.

Gabriel Chumpitaz
Gabriel Chumpitaz, diputado nacional por Santa Fe | CEDOC

El diputado nacional, Gabriel Chumpitaz, afirmó que la sociedad santafesina apoya las medidas tomadas por el gobernador Maximiliano Pullaro y destacó que se debe al hartazgo de los rosarinos de vivir bajo “la espada del narcotráfico”. “La sociedad está atravesada por la corrupción y el narcotráfico”, expresó en Modo Fontevecchia, por Net TV, Radio Perfil (AM 1190) y Radio Amadeus (FM 91.1).

Gabriel Chumpitaz es diputado nacional por el PRO de la provincia de Santa Fe. Anteriormente se desempeñó como diputado provincial en 2019 y concejal de la Ciudad de Rosario en el 2015.

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Me gustaría un balance sobre cómo se encuentra la situación en su ciudad.

La verdad es que la situación en Rosario es muy delicada, muy compleja. Estamos viviendo una guerra urbana en Rosario, que se lleva adelante a través de bandas muy precarias y violentas que hoy en día se ven acorralados por la presión del Gobierno provincial y por la presión del Gobierno nacional en distintas investigaciones criminales complejas y en las condiciones penitenciarias. Cuando se ajustaron las condiciones en pabellones de alto perfil, estas bandas criminales salieron a asesinar y acribillar a inocentes. En ese escenario de violencia que se lleva adelante, cabe destacar que hay dos escenarios que son co-adjuntos. Me refiero al lavado de activos, que es el paladar negro del narcotráfico en el microcentro y macrocentro de la ciudad; y a la Hidrovía, donde podemos hablar de narcotráfico propiamente dicho, en la salida al segundo consumidor de cocaína en el mapa de la droga, como lo es el continente europeo, que sale por el Río Paraná Atlántico y llega al norte de África. 

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Usted acompañó a Maximiliano Pullaro durante la campaña por la gobernación. ¿Cuánto de esto tiene que ver con una puja del narcotráfico con el nuevo gobernador?

Tiene mucho que ver porque cuando Maximiliano Pullaro fue ministro de Seguridad, detuvo a las cabezas de las bandas narco-criminales. A partir de allí, se disputa la segunda y tercer línea en la venta minoritaria, y cuando Pullaro asume como gobernador pone tres líneas de trabajo: primero, los reordenamientos de la institución policial, volver a poner la policía en calle, ya que Rosario necesita 200 móviles de acuerdo a sus cuadrículas y antes había entre 30 y 36 móviles, pero hoy se están desarrollando con más de 110 móviles. Lo segundo tiene que ver con la implementación de lo que se vio en las imágenes, cuando se limitan las visitas a los presos y se ajustan las condiciones carcelarias, para decirlo en términos callejeros: se pateó el avispero y las avispas salieron a picar. Tercero, las investigaciones criminales complejas, que son las que permiten detener a estos narcoterroristas. El accionar de Pullaro claramente tiene que ver con esta reacción de las bandas narco-criminales.

Gabriel Chumpitaz junto a Maximiliano Pullaro
Gabriel Chumpitaz junto a Maximiliano Pullaro.

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¿Esto es un signo de que el Estado está ganando la batalla? ¿El acto de matar inocentes es una manera desesperada frente a que perciben que con Maximiliano Pullaro la condición del narcotráfico va a empeorar?

Creo que esto es una bisagra, un punto de inflexión, porque hasta el momento las bandas narco-criminales se acribillaban entre ellos, se asesinaban entre distintos integrantes de las bandas de las distintas zonas, pero ahora cruzaron una línea que es atacar a los inocentes. Y en ese sentido creo que Pullaro tiene una tarea enorme junto a Patricia Bullrich. Tenemos una tarea en conjunto porque esto no es una lucha de idealistas rosarinos que queremos luchar contra el narcotráfico, es una lucha de supervivencia para la República Argentina, es un problema que se va a derramar de manera negativa en todo el territorio nacional. Es por eso que estamos compenetrados hace muchísimos años en defender a Rosario.

Para eso hace falta, por un lado, un gobernador decidido. Pero, al mismo tiempo, que la sociedad acompañe. ¿El sentimiento de los rosarinos es de acompañar al gobernador en la lucha contra el narcotráfico o el miedo los hace ceder?

En eso tengo una opinión muy personal: con las bandas del narcotráfico no se negocia. El humor de la sociedad rosarina es que hay que luchar contra el narcotráfico, defender el futuro de nuestros hijos. Hace muchos años que vengo trabajando en el tema y los rosarinos queremos dar fin a esta lucha que nos tiene contra la pared. El gobernador tiene el total apoyo de los santafesinos y eso no solo se ha manifestado en los medios, las redes y la prensa, sino también en todos los mensajes que nos llegan a la gobernación apoyando las acciones que está tomando el Gobierno.

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Alejandro Gomel: ¿En qué grado está inserta la corrupción que tiene que ver con el narcotráfico en la política, la policía y la Justicia? ¿Cree que se puede limpiar eso?

Claramente como funcionarios públicos tenemos la obligación de intentar depurar las instituciones. Creo que la sociedad está atravesada por la corrupción y el narcotráfico. A veces se corta la cadena por el eslabón más fino, que es la institución policial o el servicio penitenciario, que claramente están infiltrados, de la misma forma que lo están la Justicia, la política, el empresariado, el sindicalismo y toda la sociedad en general. Tenemos que empezar a trabajar en la condena social. Cuando vemos lo que pasó en otros países, como Colombia, tenemos que copiarlo. Acá en la Argentina se ha festejado cuando se ve un auto de alta gama estacionado y no se sabe la procedencia. Eso lo tenemos que cambiar, no hay que llamar empresario a alguien que trafica droga. Esas son las cuestiones sociales en las que tenemos que empezar a hacer una autocrítica.

AG: ¿Hay que correr a la policía provincial y poner fuerzas federales en la calle?

No, yo creo que la policía de Santa Fe, en términos generales, es muy buena. Ha quedado demostrado en todos los allanamientos que se llevaron a cabo esta semana. Obviamente que esta infiltrada, como lo están todas las instituciones. El narcotráfico tiene un poder de corrupción muy grande, el dinero para comprar voluntades y la violencia para impartir terror, no solo en la ciudadanía, sino en los mismos integrantes de las fuerzas, por lo cual ese poder que tiene el narcotráfico hay que enfrentarlo desde un poder mucho más grande, que es el poder del Estado.

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Patricia Bullrich en Rosario.

AG: Hay una nueva amenaza en contra de Pullaro, en donde declaran que no van a frenar la violencia hasta que el gobernador deje de implementar medidas…

Claramente se incrementa la violencia, pero se están tomando las medidas necesarias y preventivas. Hay mucho patrullaje en calle, se han acelerado las cuestiones investigativas con el Ministerio Público para dar con los autores materiales de estos homicidios y, obviamente, a partir de allí, como hilo conductor, terminar en los autores intelectuales.

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El tema referido a las amenazas es permanente, hacer colgar una bandera con amenazas al ministro y al gobernador, las amenazas de bombas, ataques a comisarías, taxistas y colectivos no implica que tengamos que detenernos. La sociedad rosarina está apoyando las medidas del Gobierno y tiene que ver con el hartazgo que tienen los rosarinos de vivir en bajo la espada del narcotráfico.

VF JL