Tras los aumentos, el gobierno dio por terminada la crisis de las naftas
Se normaliza el expendio de combustible en todo el país, aunque el Gobierno tuvo que autorizar un incremento en el precio, y otros rubros empiezan a reclamar una actualización.
Sergio Massa tomó dos decisiones para dar por terminada la etapa de escasez de naftas. Por un lado, se autorizó un aumento del 6,7% en promedio para todos los combustibles, con un incremento superior en algunas provincias. Además, se retrasó el cobro de un impuesto para evitar que ese aumento sea más fuerte.
El Gobierno tenía una clara urgencia por resolver un problema indeseado en medio de la campaña electoral, con largas filas de autos y camiones, estaciones de servicio cerradas, o ventas con cupos limitados.
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La forma en la que se solucionó el conflicto probablemente se vea replicada en otros rubros, ya que el Gobierno viene postergando decisiones y, de algún modo, esconde la inflación debajo de la alfombra.
El transporte público, la tarifa de electricidad y gas, la medicina y la educación privada venían con una dinámica en la cuál aumentaban acorde a la inflación, pero desde hace unos meses el precio está congelado y atrasado respecto a otros rubros.
