Cinco personas, entre ellas un hombre y una mujer de nombre Ramón Altamirano y Gladys Cabrera, fueron detenidos esta noche por la Policía en la investigación por el asesinato de Candela Rodríguez, informaron fuentes judiciales. En las próximas horas serán indagados por la Justicia, para determinar, en principio, su responsabilidad en el encubrimiento del caso.
En estos momentos, efectivos de la Policía Científica revisan una camioneta Traffic blanca en la que habrían transportado a Candela.
Las detenciones fueron realizadas por los investigadores a partir del contraste de material genético secuestrado en una casa del partido bonaerense de Hurlingham, ubicada a pocas cuadras del lugar donde apareció el cadáver de Candela, en la que se habrían encontrado restos de alimento balanceado, cabellos y comida que coincide con el hallado en el cuerpo de la pequeña, de acuerdo con los resultados de la autopsia.
Estas son las primeras detenciones que se realizan en el marco de los allanamientos hechos en torno al caso que conmueve al país.
De acuerdo con la hipótesis que llevó a apresar a los sospechosos, Candela habría estado secuestrada en dos casas, ambas ubicadas en el radio cercano adonde apareció su cuerpo. Cabrera es la propietaria de una de ellas. Allí se encontraron tres perfiles genéticos, de los cuales uno es el de la nena. Mientras tanto, Altamirano -quien aseguró haber estado en la segunda propiedad para realizar trabajos de carpintería- está sospechado de haber cuidado de la niña y de haber acondicionado su cuerpo durante el fin de semana anterior a la aparición del cadáver.
