En su primera presentación en el Foro de París por la Paz, Alberto Fernández reiteró su condena a la guerra desatada por Rusia y detalló ante Emmanuel Macron las consecuencias negativas que produce el conflicto bélico en el hemisferio sur.
“Algo que me impactó desde el principio de esta guerra, es que en una parte del mundo lo que conmocionó fue la invasión, pero en otros lugares como Latinoamérica o en África lo vieron desde otro ángulo. Hay una visión de la partición del mundo y tenemos que escucharnos unos y otros”, dijo el presidente francés en el panel llamado “Universalismo desafiado por la Guerra en Ucrania”. Minutos después, le dio la palabra a Alberto Fernández: “El presidente de Argentina, habla en nombre de Argentina, pero también en nombre del continente, dada su responsabilidad como presidente de la Celac”, lo presentó Macron.
El jefe de Estado argentino detalló que “el mundo viene de cascadas de desgracias” y dijo que en Argentina esas desgracias son el endeudamiento, la pandemia y ahora la guerra. “Nuestro país viene de sufrir un alto endeudamiento y cuando estamos tratando de salir llega la pandemia y cuando parece estar desapareciendo, aparece la guerra. La guerra es un problema que excede mucho a Rusia y Ucrania. La pandemia se llevó cuatro veces más ciudadanos que en los países desarrollados, en América Latina las expectativas de vida cayeron 1,3 años. Esto está diciendo que en ese terreno de desigualdad debemos enfrentar el conflicto de la guerra. La invasión de Rusia no midió las consecuencias que iba a tener en todo el mundo. No estamos haciendo un planteo ideológico, acá en el norte vuelan misiles, pero en el sur se desarrolla el hambre”.
La conferencia se llamó “Universalismo desafiado por la guerra en Ucrania”
Fernández planteó que “el conflicto tenemos que resolverlo entre todos”, línea que profundizará junto a Macron en el G20 que se llevará a cabo la próxima semana en Bali, Indonesia. “Algunos dirán que el conflicto está generando un problema de seguridad alimentaria. Vergüenza debería darnos que después de perder más de seis millones por la pandemia, el mundo se anime a llevar adelante una confrontación bélica como ésta”, adelantó para después reclamar:
“¿Dónde está la ética política que ve semejante desastre y no reacciona? Vergüenza debería darnos”.
Sobre las consecuencias que generó la guerra hasta ahora en Argentina, el mandatario explicó que “la guerra desató una crisis energética que en Europa se vive más que en ningún otro lado, pero en la Argentina también se sufre porque tiene que importar gas y los precios se fueron por las nubes. A la Argentina solo este año le significó una pérdida de 5 mil millones de dólares”.
También pidió repensar los programas económicos en referencia a los sobrecargos que se pagan al Fondo Monetario Internacional: “Los organismos multilaterales de crédito, donde hay países endeudados como Argentina y Ucrania, ¿Qué están haciendo para repensar los programas económicos que les piden a esos países para pagar sus deudas frente al cuadro internacional que se vive?”.
Ante el conflicto bélico, explicó que “es bueno que volvamos a poner en valor la palabra paz. Aun cuando a muchos les suene naïf, y piensen que es un acto ingenuo reclamar la paz. Nada es más revolucionario en el mundo del presente que reclamar la paz”. Y agregó: “Venimos trabajando con el presidente de Francia desde hace mucho para reclamar que Rusia y Ucrania vuelvan a sentarse en una mesa de diálogo donde nosotros seamos también actores y encontremos una solución al problema.
Atento a la amenaza nuclear que abrió la guerra, Fernández dijo que “es una amenaza que a todos nos atormenta, que alguien pueda usar en este conflicto armas nucleares o que en un conflicto se puedan bombardear centrales atómicas. No quiero pensar si después de todo lo que pasó, vamos a tener que soportar que una nube atómica esté sobrevolando y contaminando nuestros países. Quiero pensar que eso no va a ocurrir” y concluyó: “Digo todo esto porq tenemos el imperativo ético de reclamar la paz”.