Dos advertencias fueron suficientes. Los dichos de Cristina Fernández de Kirchner en La Plata anticiparon los próximos movimientos políticos y económicos del gobierno nacional. Si bien ya todos hablan de la necesidad de "oxigenar" el gabinete del presidente Alberto Fernández, en lo inmediato la idea es esperar a que baje la espuma tras el encendido discurso de la vicepresidenta, y luego renovar los ministerios. Reemplazar ministros y "funcionarios que no funcionan" está descontado. Pero en Casa Rosada hay discusión por la impronta y la velocidad de los cambios. Sobre todo por el desgaste de la imagen del mandatario en los últimos meses.
Es que más allá del reclamo de CFK, en Balcarce 50 también están de acuerdo que hay algunos funcionarios que no cumplieron las expectativas, sobre todo desde que comenzó la batalla contra el coronavirus el 20 de marzo. "No podemos cambiar en lo inmediato. Se está hablando y organizando como va a seguir", afirmó a PERFIL un ladero del jefe de Estado.
Funcionarios en la mira sobran
Hay muchos rumores y operaciones cruzadas, sin embargo hay determinadas áreas que se descuentan para renovar. La más importante es en el Ministerio de Justicia. Allí está Marcela Losardo, de estrecha confianza del Presidente. El kirchnerismo considera que las cosas no están saliendo como quiere la vice y no se descartan nuevos arribos.
En lo inmediato el más cuestionado es el Ministro de Salud, Ginés González García, producto de los idas y vueltas por la vacuna que debe llegar a la Argentina en las próximas horas. Otro que quedó en la mira fue el canciller Felipe Solá, quien inventó un diálogo entre el presidente electo de los Estados Unidos, Joe Biden, y su par argentino. También hay quienes miran al titular de Educación, Nicolás Trotta, marcado a fuego por la falta de clases presenciales en casi todo el país durante todo el 2020.
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Un ministro que no está en el radar señaló a este medio que los cambios se empezaron a analizar tras la primera carta de Cristina cuando habló de "funcionarios que no funcionan". La única salida del Gabinete, luego de ese texto, fue la de María Eugenia Bielsa, hasta entonces al frente del ministerio de Desarrollo Territorial y Hábitat. La reemplazó el intendente de Avellaneda Jorge Ferraresi.
También sucede una particularidad dentro del gobierno y es que los ministerios están "loteados", con un titular que responde a un espacio dentro del Frente de Todos, un vice de otro sector, y otros cargos repartidos, lo que dificulta el balance a la hora de hacer cambios.
"Todos aquellos que tengan miedo o que no se animan, hay otras ocupaciones además de ser ministro, ministra, legislador o legisladora, vayan a buscar otro laburo, necesitamos gente que los sillones que ocupan sea para defender definitivamente los intereses del pueblo", lanzó Cristina Kirchner en La Plata. Más de uno sabe que no le queda mucho tiempo.
RI/FF
