La designación del teniente general Carlos Alberto Presti, jefe del Estado Mayor General del Ejército, como nuevo ministro de Defensa en reemplazo de Luis Petri reavivó un debate histórico: el rol de los uniformados en la conducción del área. Mientras sectores progresistas y organizaciones de derechos humanos cuestionaron el nombramiento por considerar que implica un retroceso, sorprendió la defensa pública que hizo César Milani, exjefe del Ejército durante el kirchnerismo.
En un extenso mensaje en X, Milani sostuvo que es “rotundamente falso” que nombrar a un militar al frente de la cartera (que desde el 83 estuvo a cargo de civiles) sea un retroceso democrático, tal como había planteado Agustín Rossi, exministro de Defensa. Y aprovechó para disparar contra la conducción del peronismo en los últimos años.
“Retroceso fue el resultado electoral de 2023, consecuencia directa de un peronismo que insistió en reciclar dirigentes obsoletos, desconectados del pueblo y de la realidad. Funcionarios que formaron parte del fracaso del gobierno de Alberto Fernández y que terminaron allanando el camino para que hoy gobierne una administración que entrega soberanía, desarma al Estado y desintegra la Nación”, escribió.
El mensaje de Milani: Fuerzas Armadas, peronismo y doctrina
El exjefe del Ejército argumentó que la presencia de un militar en Defensa “no solo no es un retroceso”, sino una decisión que —a su juicio— “el peronismo debió tomar hace décadas”. Sostuvo que la integración orgánica de las Fuerzas Armadas a un proyecto nacional fue un planteo histórico del peronismo y que, tras el golpe de 1955, la institución quedó replegada bajo “una doctrina liberal y extranjerizante”.
Según Milani, lo preocupante no es que el área quede en manos de un uniformado, sino que ese militar “responda al ala liberal que históricamente perjudicó a la institución”, en referencia al alineamiento ideológico del Gobierno de Javier Milei. Y proyectó un futuro ideal donde la cartera sea conducida por “un militar auténticamente nacional, comprometido con los intereses de la Patria”. "Como siempre lo planteó el General Perón", indicó.


La crítica de Rossi: “Un enorme retroceso”
El contrapunto se desató apenas Milei anunció los reemplazos de Patricia Bullrich y Luis Petri, que dejarán Seguridad y Defensa para asumir en el Congreso. Rossi cuestionó la ruptura de la tradición de conducción política civil del área de Defensa y alertó por las implicancias institucionales: “¿El futuro ministro va a ser el representante del Presidente ante las Fuerzas o el representante corporativo de las Fuerzas ante el Presidente?”, planteó.
En un mensaje que tituló “Enorme retroceso”, recordó que la conducción civil se mantuvo sin interrupciones desde la recuperación democrática y cuestionó que un militar quede involucrado en “el destino del Gobierno”, cuando —según dijo— debería estar preservado de situaciones políticas coyunturales.
Rossi también apuntó al malestar dentro de las Fuerzas Armadas: “Mientras Milei paga salarios de hambre al personal militar y Petri destruyó la obra social de los militares, ¿piensan que poniendo al frente de la cartera a un militar van a contener el malestar existente?”.
Quiénes son Carlos Presti y Alejandra Monteoliva, los nuevos ministros de Javier Milei
Una decisión inédita desde 1981
Con la designación de Presti, el Gobierno rompe con más de cuatro décadas de conducción civil en Defensa. El último militar en ocupar el cargo había sido Norberto Couto, en 1981, durante la última dictadura cívico-militar.
La Casa Rosada defendió la decisión al considerar que significa “el fin de la demonización” de las Fuerzas Armadas. Los nuevos ministros —Presti en Defensa y Alejandra Monteoliva en Seguridad— aún no tienen fecha confirmada para jurar. La reconfiguración se suma a los últimos movimientos del Gabinete, tras el ascenso de Manuel Adorni como jefe de Gabinete y de Diego Santilli al frente del Ministerio del Interior.
GD/ML