En solo dos semanas, el gobierno nacional y la oposición tendrán un diagnóstico certero del segundo y el tercer distrito electoral del país. Mientras que el 12 de mayo Córdoba elegirá gobernador, con el peronista Juan Schiaretti como gran favorito, hoy será el turno de Santa Fe. En el distrito gobernado desde 2007 por el socialismo se dirimirán en las PASO el poder del oficialismo provincial y las chances de un justicialismo que en las encuestas asoma como la posible fuerza más votada, Cambiemos, que luego de pelear voto a voto con el socialismo la gobernación santafesina en 2011 y 2015 (con Miguel del Sel en el PRO) y convertirse en el partido más votado en las legislativas de hace dos años, figura relegado a un tercer puesto, según los sondeos previos.
Uno de los temas que dominaron la campaña fue el narcotráfico. Mientras el socialismo, con el gobernador Miguel Lifschitz a la cabeza, intentó mostrar algunos índices de criminalidad en baja y varios narcotraficantes procesados y encarcelados, sus opositores hicieron foco en que Rosario, la principal ciudad de la provincia, triplica la tasa de homicidios comparado con el resto del país.
Bonfatti intentará volver a sentarse en el sillón de la Casa Gris, luego de su período como gobernador entre 2011 y 2015. En las encuestas, quien figura con mayor intención de voto es el candidato del socialismo (el partido quedó tercero en 2017). Esos mismos sondeos indican que el peronismo puede convertirse hoy en la fuerza más votada en la provincia, si se suma a los dos postulantes que definirán quién se quedará con la candidatura por el PJ. El senador Omar Perotti selló un acuerdo con el kirchnerismo provincial, pero evitó durante toda la campaña hacer referencias a Cristina Kirchner. Esa alianza con Agustín Rossi lo convirtió en el favorito dentro del peronismo y también con grandes posibilidades de recuperar un distrito para su partido, que lo perdió a manos del socialismo hace 12 años. La rival de Perotti en las PASO será María Eugenia Bielsa, quien armó su campaña sin el aparato y con críticas al socialismo, a Cambiemos y a su rival dentro del partido.
PASO en Santa Fe: los Monos, Carrió y el miedo de Cambiemos a otra derrota
Después de la “ola amarilla” de las elecciones legislativas de 2017, cuando Cambiemos obtuvo una clara victoria sobre el kirchnerismo y el socialismo (quedó tercero a casi 24 puntos), el intendente radical de Santa Fe, José Corral, corre desde atrás. En los últimos días tuvo el apoyo de la plana mayor de Cambiemos, aunque esas apariciones no fueron en el mejor momento. Primero fue Elisa Carrió, cuando dijo: “Si quieren votar a los Monos, voten a Bonfatti”. Días después, el que llegó a territorio santafesino en una visita relámpago fue el presidente Mauricio Macri, quien lo hizo esta misma semana en la que se produjeron disparadas récord del dólar y del riesgo país y con los índices del primer mandatario en caída, producto de la crisis económica.
Elecciones en Santa Fe: qué dicen las encuestas de cara a las PASO de este domingo 28 de abril
En los primeros tests electorales del año, los candidatos de la Casa Rosada quedaron terceros en Río Negro y Neuquén. El Gobierno debió conformarse con los triunfos de los oficialismos provinciales en ambos distritos y que los candidatos del kirchnerismo quedaran en el segundo lugar. En las primarias que se celebraron en Chubut y en Entre Ríos, hubo amplios triunfos de los candidatos del peronismo, que tejieron alianzas con el kirchnerismo.
