ANMAT autorizó un medicamento contra el cáncer de vejiga avanzado, el primero de su tipo
Es el décimo tipo de cáncer más frecuente en el mundo y el sexto más prevalente entre los hombres. El nuevo tratamiento lleva de una supervivencia global de entre 6 y 9 meses a más de 13.
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Télam
La Administración Nacional de Medicamentos, Alimentos y Tecnología Médica(ANMAT) aprobó el tratamiento con Balversa, un medicamento de vía oral para pacientes con cáncer urotelial localmente avanzado o metastásico -que progresa a otros órganos-, el tipo más común de cáncer de vejiga, para el cual no existían terapias disponibles.
La habilitación de este nuevo tratamiento fabricado por la farmacéutica Janssen (Johnson & Johnson), convirtió a la Argentina en el cuarto país del mundo en contar con un novedoso fármaco para pacientes con cáncer de vejiga.
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El medicamento esta compuesto por el principio activo erdafitinib y se encuentra indicado para personas adultas con carcinoma urotelial avanzado que no respondieron bien a la quimioterapia, o recayeron después de recibirla, y que presentan una mutación en el gen receptor del factor de crecimiento fibroblástico (FGFR), que son enzimas involucradas en varias funciones vitales para la proliferación celular.
La alteración de FGFR hace que la células se vuelvan más malignas, es decir, que las células tumorales mueren menos, se multiplican más y pueden migrar más, aumentando las chances de metástasis. Esto ocurre entre el 15% y el 20% de los tumores uroteliales (de los uréteres, la vejiga o la uretra).
Cómo funciona Balversa
Fernando Galantenik, investigador clínico y médico oncólogo del Centro de Educación Médica e Investigaciones Clínicas (CEMIC), explicó a Telam en que consiste el nuevo medicamento: "El Erdafitinib es una molécula de la llamadamedicina de precisión, lo que trae aparejados múltiples beneficios por tratarse de un tipo de tratamiento que reconoce que cada paciente es único y que las diferencias individuales en sus genes, entorno y estilos de vida deben tenerse en cuenta en los tratamientos que reciben".
El investigador, responsable de la unidad de tumores genitourinarios, sostuvo que el medicamento “marca un nuevo paradigma para el tratamiento de cáncer urotelial metastásico.
Erdafitinib es un inhibidor de Tirosina-quinasa que se une e inhibe la actividad enzimática de FGFR -que está presente en las células tumorales del cáncer de vejiga, así como en las células sanas de todo el cuerpo- en base a datos in vitro. Esto se traduce en un proceso que lograevitar la multiplicación de las células cancerosas en el cuerpo del paciente.
Los principales efectos secundarios que apareja el medicamento son problemas en los ojos, como sequedad, inflamación y trastornos en la retina, y altos niveles de fosfato en la sangre (hiperfosfatemia), lo que puede provocar la acumulación de minerales como el calcio en diferentes tejidos de su cuerpo.
Según Galanternik, mientras los actuales tratamientos son limitados y no proporcionan un control efectivo en la mayoría de los pacientes, teniendo una tasa de respuesta de solo 20% y una supervivencia global de 6 a 9 meses, Erdafitinib ha demostrado tener una tasa de 40,2% y una sobrevida de 13,8 meses.
La aprobación de esta terapia se basó en los resultados de un ensayo clínico de fase 2 de 99 pacientes con carcinoma urotelial avanzado que habían progresado durante o después de al menos una quimioterapia previa y que tenían al menos una mutación de FGFR para la que está indicado el fármaco.
El décimo cáncer más frecuente
La Sociedad Americana de Cáncer indica que el de vejiga es el más frecuente de todos los tumores epiteliales, representando el 90% de los mismos. Además, es el décimo más frecuente del mundo, con aproximadamente 550.000 casos nuevos al año.
En Argentina, las últimas cifras disponibles son del 2020, las cuales indican que hubo 3785 casos nuevos en ambos sexos, siendo el 78% (2955) de ellos en varones. Según datos del Fondo Mundial para la Investigación del Cáncer, este tipo suele ser el sexto más prevalente en hombres, mientras que el 17° en mujeres.
Los signos más frecuentes que se encuentran en este tipo de cáncer son: sangrado en la orina -presente en el 90% de los casos-, dolor al orinar y dolor pélvico. La detección temprana puede mejorar las probabilidades de que el tratamiento sea eficaz, sin embargo, esto es difícil, ya que en etapas primarias puede progresar sin síntomas.
Según la Sociedad Estadounidense de Oncología Clínica (ASCO por sus siglas en inglés), la esperanza de vida en pacientes con cáncer de vejiga localmente avanzado es del 35% en cinco años.
Si la enfermedad avanza a la etapa metastásica, cuando se propaga a otros órganos, este número se reduce al 5% y aproximadamente uno de cada cinco pacientes con metástasis tiene un cambio en FGFR.
Actualmente, el medicamento para tratar el cáncer de vejiga avanzado se encuentra disponible para su comercialización y su cobertura depende de cada efector de salud.
