Un nuevo capítulo en la extendida crisis habitacional que afecta a la zona metropolitana tuvo lugar esta mañana, esta vez en la localidad bonaerense de Ciudad Evita, partido de La Matanza, donde mil personas fueron desalojadas de un predio abandonado en donde pretendían instalar viviendas.
Los desalojados permanecen a la vera de la ruta esperando una respuesta de las autoridades a su reclamo de tener "una vivienda digna", según anunciaron los delegados de la toma, quienes serían recibidos por funcionarios nacionales en la Casa de Gobierno.
El terreno -ubicado en ruta 21 y Cristanía- es propiedad del Estado y los ocupantes reclaman que les permitan construir sus casas ya que, según indicaron, no tienen a dónde ir.
El desalojo fue llevado a cabo por cientos de efectivos de la Guardia de Infantería de la Policía Bonaerenses, con motocicletas y caballos, bajo el mando del Capitán Vega por orden de la jueza Sandra Marcos González.
En declaraciones a Crónica TV, uno de los delegados de las familias sin techo, explicó que "toda la gente está acá se encuentra sin un hogar"
"No queremos que nos regalen nada, queremos pagar las viviendas en cuotas, en vez de pagar 300 pesos de alquiler, preferimos ir pagando para tener una vivienda", detalló.
"Acá hay 1.000 familias, con 1.300 chicos, que no tenemos a dónde ir, queremos una respuesta a nuestro reclamo de tener una vivienda digna, como cualquier ser humano", agregó.
Sobre los terrenos, el delegado indicó que "están abandonados hace mucho tiempo y nosotros los necesitamos", al tiempo que señaló "acá hay muchos robos y basura que nosotros limpiamos".
"Vamos a ser recibidos por Parrilli (Oscar, secretario de la Presidencia) que nos va a gestionar una reunión con el presidente Néstor Kirchner", explicó el vocero de los vecinos desalojados.